Viñeta: El ángel de los desamparados, Neny Cullen

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"Viñeta Aniversario Twilight Contest"

Nombre de la viñeta: El Ángel de los desamparados

Autor: Neny W Cullen

Pareja: Edward / Bella

Summary: ¿Que haces cuando el ángel que te ha salvado del dolor está sufriendo? “Que milagro tiene que pasar para que me ames. Dice mucha gente que los hombres nunca lloran pero yo he tenido que volver a mi niñez una vez más. Acompáñame en el viaje que volar solo no puedo” (Mi princesa, David Bisbal)

Rating: T

El Ángel de los Desamparados

-Edward, lo siento pero no puedes entrar ahí!..Edward detente !!- sabia que Ángela me llamaba, me gritaba que me detuviera y me decía algo mas pero mis piernas seguían avanzando hacia adelante. Increíble no?

Abrí la puerta abruptamente pero nadie se percato de mi presencia. Todo el mundo la oía a ella, sobre una tarima, se encontraba absorta dictando una maldita conferencia. Como siempre tan hermosa, tan fuerte y presencial. Tan malditamente perfecta…o al menos eso hacía creer a los demás. Pero yo sabía que no era así.

Sabía que era delicada, sabía que sufría como nadie en este mundo.

-Edward, tienes que irte. Sabes que no te quiere ver aquí- la voz agitada de Ángela se oyó a mi lado pero no la quise oír. Camine por el pasillo del anfiteatro hacia la tarima, mientras ella seguía dictando los beneficios de la nueva terapia. Terapia que había resultado ser prácticamente perfecta, al menos en mí

-Así, damas y caballeros, es como por medio de un ejercicio físico, mental y espiritual logramos sanar el cuerpo de nuestros pacientes- miro hacia el público y sonrió- además de que el paciente y el médico deben estar completamente comprometidos con la terapia. Y obviamente un espíritu libre de dolores. Un espíritu alegre

-Perdón!?- sin querer mi boca hablo antes que pudiera reprimirla- Un Espíritu libre de dolores??- Ella miro hacia donde estaba y sus ojos se abrieron de espanto- Doctora Swan, usted está diciendo que para sanar a una persona es necesario un espíritu alegre?

Ella me miro por un minuto interminable mientras oía a lo lejos el murmullo de los presentes al percatarse de mi interrupción

-Edward, vete de aquí- susurro Ángela a mi lado, mirando para todos lados

-No- respondí con los dientes apretados sin quitar la vista de la señorita perfección en la tarima- no hasta que ella diga la verdad. Así que dígame doctora…es así como usted alivia a sus pacientes?

Ella respiro profundo y cerró los ojos. En cuanto volvió a mirarme supe que esta discusión seria dura

-Damas y caballeros, déjenme presentarles a Edward Cullen. De hecho el único paciente que ha recibido el tratamiento del que les he hablado.

-Si, así es…mírenme. Un maldito conejillo de indias que...

-Que camina- interrumpió ella sin tapujos y con voz dura- El único paciente al que se le ha diagnosticado paraplejia absoluta y que después de una año es capaz de correr no? Y contestando a su pregunta Sr. Cullen, Si, es necesario un espíritu alegre

-Entonces por qué rayos usted no se ha sanado?

Maldición Edward, no debiste haberlo dicho!. En cuanto vi su cara supe que le había hecho daño. En segundos trato de recuperarse y sonrió fríamente

-Sr. Cullen creo que su pregunta no va al caso. Sera mejor que se retire- dijo mirándome con dolor, pero de alguna forma yo sabía que tenía que hacer esto. Tenía que sacarla de su maldita equivocación. Sabía que era la última oportunidad que tenia para sacar lo que tenia adentro

-No me iré hasta que me explique, como es que usted se muestra tan alegre, tan..Maravillosa, tan divinamente hermosa con un corazón de oro. Que se dedica a sanar a cada uno de sus pacientes con absoluta dedicación no logra encontrar paz…dígame por favor doctora Swan…como es que no ha encontrado una cura para usted misma?

En cuanto termine de hablar me di cuenta que ahora estaba a solo unos tres metros de ella y pude darme cuenta cuánto dolor le había causado. Pero no era nada en comparación con el que ella misma se hacía. Su barbilla temblaba y sus ojos se aguaron horriblemente

-Lamento decirle Sr. Cullen, que mi espíritu no tiene cura

-Basura!!..Sabes que eso es basura..Yo sé que no es así- grite frustrado de verla tan cerrada a la realidad

-Tu no sabe nada!!-grito de vuelta como una verdadera leona. Está furiosa y lo podía notar en su rostro, como también notaba el dolor en sus ojos- No sabes nada de nada

- Se que sabes sonreír, pero cuando lo haces y te das cuenta de ello, te castigas a ti misma por ese “pecado”- mi voz salió diez octavas más altas de lo que esperaba y sabia que la gente me miraba extrañada, pero si ella se negaba a ver la realidad yo haría que la viera. Me acerque a ella hasta quedar a un metro de distancia y la mire a los ojos- Seque cuando ves a Alice con Jasper piensas que Dios te perdona. Sé que quieres ser amada pero que te niegas esa posibilidad. Sé que cuando te hice el amor había un brillo en tus ojos que obligaste a apagar- a lo lejos pude oír como alguien aguantaba la respiración pero no me importo ventilar aquello. A ver si de alguna manera ella despertaba de esta pesadilla- Se que tu espíritu se estaba sanando pero te negaste a eso. No permitiste que yo fuera tu medicina Bella. Sé que huiste cuando te diste cuenta que podías ser completamente feliz conmigo, porque no quieres darte el derecho a ser feliz…

-Porque no tengo ese derecho!- grito interrumpiéndome- Nadie que haya matado a sus padres tiene ese derecho

-Bella- gemí tratando de sacarla de su error

-No!!Bella No! Aléjate Edward…ya déjame en paz!- en cuanto dijo aquello salió corriendo empujándome en su camino hacia la salida del salón. La vi salir de allí como alma que lleva el diablo. LA vi salir de ahí junto con mi corazón.

Si tan solo pudiera retroceder el tiempo a un año atrás y jamás tomar el maldito volvo. Ahora no estaría más destrozado como lo estoy ahora. Si tan solo aquel choque contra el camión me hubiese matado. Eso habría sido más simple que lidiar con la famosa Doctora Isabella Swan..

“El Ángel de los desamparados”