EVADIENDO EL AMOR Capitulo 16

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Mi agitada vida quedo reducida a ser ama de casa, casi reí ante aquel absurdo pensamiento, ni aunque volviera a nacer me dedicaría a tiempo completo a esa tarea. Bien, admito que me siento más calmada, más relajada, pero extraño correr de obra a obra, diseñar y gruñir con … sacudí la cabeza mientras seguía buscando en la red el curso que deseaba.

_Esto lo hago por mi_ murmure a la pantalla con una enorme sonrisa_ es algo que me gusta y que siempre he deseado_ abrí las páginas de las universidades que ofertaban la carrera a distancia así como detalle la opción de estudiar en la universidad de Seattle.

Al ver la hora en la pantalla casi la suelto, iba contra tiempo para nuestra reunión con Alice y Rose. Alice estaba más que nerviosa estando a dos semanas de la boda parecía que nada le gustaba.

Corrí a mi habitación recordando las palabras de Edward al dejar la cama en la mañana

_ Si es un nuevo inicio espero que mudes tus cosas a aquí_

Sacudí la cabeza, mientras sacaba unos pantalones de mezclilla y un abrigo grueso, aun quedaban algunos días de invierno. Me arregle. Corrí al auto, Alice no dudaría en matarme por llegar tarde. Mientras conducía las duras palabras de mis amigas resonaron en mente

_ Te casaste_ había dicho Alice con un dejo de aburrimiento_ no me extraña, lo que en verdad me sorprendió fue que lo hicieran como unos delincuentes, escondiéndose de todos, excluyendo a “las personas importantes”_ por más que quise excusarme o explicarle ella no lo permitió_ no confiaste en nosotras, no somos dignas siquiera de compartir contigo una etapa tan hermosa. Sabes lo irónico de todo que mientras creía que mi hermano se había ido con una de sus amiguitas estaba retozando contigo y yo tratándole como la peor persona del mundo_

_Al menos fuimos importantes para cuando tenias ganas de maldecir, patalear y despotricar en su contra_ dijo Rose con frialdad_ al menos para eso somos buenas_

_ No quiero que me hables, déjame pensar_ excuso Alice saliendo de mi casa_ al menos espero que no lo hagas infeliz_ murmuro mirándome sobre el hombro_ él en verdad te quiere, tu por otro lado no sabes ni que sientes por ti misma_

Las dos estuvieron sentidas conmigo por dos semanas.

Que rápido pasan los días, esta semana seria la cuarta de vivir juntos, sexta de “casados”, mordí el carrillo con fuerza. Un mes viviendo juntos, un mes de altas y bajas, de enfrentarnos a todos, de aparentar, de…

_Que cambiante soy_ dije en voz alta_ ni la luna cambia tan rápido_ detuve el auto sobre la cebra, y espere paciente al cambio.

El resto del camino hasta la boutique donde me esperaban mis amigas, mi madre y mi suegra fue en relativa calma.

Al llegar Esme me dedico su mirada de no te apruebo. Mi madre sonrió antes de abrazarme como si lleváramos siglos sin vernos. Alice y Rose ya estaban midiéndose sus trajas

_ TU vestido será gris_ comento mi madre_ ¿Cómo has estado?_ pregunto cuando por fin me senté y hacia caras a Ethan en su carriola

_Bien_ dije sin mirarla

_No lo pareces_ la voz de Esme me hizo apretar los dientes_ te ves mas pálida_

_Tu hijo es insaciable_ respondí con sorna_ quizás deba cambiarme de habitación haber si consigo reponer fuerzas_ chasqueo la lengua como reprendiéndome pero reste importancia a ello_ ¿ustedes ya vieron sus atuendos?_ cuestione con sinceridad_ Mamá creo que a ti te iría bien un burdeo, hasta la rodilla y con un corte imperial_

Mi madre se dirigió a una de las dependistas para buscar su vestido, asegurando que buscaría uno como indique o parecido, aunque René no era de colores fuertes ella prefería el rosa palo, el celeste y la paleta de pasteles.

_El domingo esperamos a que fueran a casa de tus padres a almorzar_ murmuro Esme

_ Alice y Rose fueron nuestra casa, teníamos cosas pendientes Esme, además no sabía que estábamos invitados al almuerzo_ señor si el fin de semana anterior casi no sobrevivo a la tensión.

Mi padre no paraba de mirarnos como si lo hubiésemos traicionado, Esme fruncía sus labios cada que Edward se acercaba a mí. Carlisle parecía pensativo, de no ser por Emmett ese almuerzo hubiese sido la mierda. Tras el almuerzo mi madre nos llevo a la cocina.

Alice y Rose aun estaban enojadas conmigo por lo que me senté lo más alejada de todas, lo único que quería era correr lejos de todos. Con un vaso de té helado frente a cada una, y la mirada severa de mi madre se dio inicio a “las típicas tardes”

_ Esme, deja de actuar como una cría, Edward ya es un hombre adulto_ regaño mi madre_ Ellos dos deben ver como llevan su vida, no podemos estar tras ellos por as que queramos_ murmuro mi madre poniendo su mano sobre la de Esme_ Isabella es la mejor amiga de tu hija, siempre ha sido como una hija para ti, desde que nos mudados aquí tú la acogiste como familia, raro era que esto no hubiese sucedido, hasta yo lo veía venir_ declaro solemne mi madre

_Pues no esperaba que una de mis hijas se casara con mi Edward_ reprocho sin mirarme

_ Y yo no esperaba que fueras tan retrograda y ciega_ le dijo mi madre_ ¿Quién insistió en llevarlos al psicólogo?¿quien sugirió que debían ver un terapeuta?_ planteo varias preguntas a las cuales Esme solo levantaba la barbilla en respuesta_ tu también lo veías, estas herida de no poder tirar la casa por la ventana con otra boda, pero ese día es de ellos no de nosotros vieja amargada_ murmuro mi madre jocosa_ además mira tienes la casa para ti y Carlisle, así que los dos pueden…_

Alice, Rose y Yo gritamos al tiempo haciendo callar a mi madre. Todas reímos, la verdad es que por muy grande y madura que seas no quieres saber, ver o imaginar que hacen tus padres cuando están asolas

_ Yo, solo digo que no serás mi madrina, si acaso dama de honor y eso no lo mereces_ aseguro Alice sonriéndome por primera vez en dos semanas_ no puedo estar enojada por mucho tiempo contigo, pero sigo herida_

_ A mí me da igual, tu nunca me has considerado importante_ la acusación de Rose me hizo reír a carcajadas

_ Estas hormonal amiga_ recordé_ claro que eres importante, todas lo son… pero… era hora de crecer de seguir a mi corazón_

Trate de ser sincera al decir los motivos de la boda_ hay dediciones que estallan en tu cabeza y no te paras a pensar en lo demás solo en si serás feliz, eso nos sucedió, yo no esperaba verlo en Vancouver… así que su llegada fue como una revelación_ susurre tratando de no ponerme colorada y de no decir “además estaba más ebria que una cuba”_ sentimos tanto haberlos excluido_

_ Además hay la posibilidad de que seamos abuela_ las palabras de René me hicieron atragantar.

Vinieron las preguntas una tras otra ¿Qué si me protegía? ¿Qué si sabia en que me metía? ¿Que si esto? ¿Que si aquello? ¿Qué eres una irresponsable?

_No es seguro_ chille tratando de defenderme_ las dos pruebas que me he hecho han dado negativo_

Pero aquello pareció no calmar a Esme , ni silenciar a mis animadas amigas, por varios minutos u horas soporte oyéndolas hacer planes con un hipotético bebé que no sabía si existía.

_ Isabella…_ parpadee varias veces_ ¿hija, estas bien?_ pregunto mi madre angustiada

_ Sí, estoy bien ¿por qué?_

_Esme, llevaba hablándote desde hace rato y no respondías, creyó que te habías dormidos pero no, tenias la mirada perdida_

Me sonroje con fuerza_ pensaba. Cosa que era cierto.

El vestido gris paloma que Alice escogiera para mí, me hizo sentir expuesta, nada de tiras, al contrario un hermoso estrape en forma de corazón, tipo corsé que dejaba mis senos casi en mi barbilla, bueno exageraba pero así me sentía- una cinta blanca con un moño y la caída en globo por encima de la rodilla, además la altura de las zapatos a juego con el vestido

_ Tendrás que usar el cabello recogido para que te veas estilizada_ ordeno la diseñadora_ este modelo es d-i-v-i-n-o_ deletreo con orgullo

_ Me matare_ chille bajito_ me siento ridícula_ exprese ganándome una mirada negra_ Bien, todo por la felicidad de mi amiga_

Tras la prueba de vestido, decidimos merecíamos un café. Aquella casual cita de amigas se convirtió en la reunión pre-boda de Alice quien no dudo en pedir la ayuda con cosas pendientes, ella como planeadora decidió no contar con nadie más. Lo que llevo a que durante las semanas antes de la boda nuestro tiempo seria de Alice.

_ El jueves y viernes, de cuatro a ocho serán las clases de baile, avisen a sus esposos, novios o amantes señoras_ murmuro apuntándolo en su agenda electrónica_ el sábado será la cena de ensayo. Rose recuerda el discurso. Bella espero que escojas el traje de Edward con tiempo él es el padrino_ abrí la boca para protestar, pero en su lugar asentí_ espero que mañana me acompañen a ver el salón, y puntualidad mujeres, puntualidad_

Pasada las seis de la tarde entre en la casa, sintiéndome cansada. Bostezando y tratando de evitar que mis ojos se cerraran prepare la cena, y volvió a mi tarea de buscar mi curso estaba tan centrada que no note cuando él llego

_ Tendré que esperar varios meses_ me queje en voz alta

_ ¿Qué?_ chille asustada llevándome la mano al corazón_ lo siento, creí que habías oído cuando cerré la puerta_ camino hasta a mí para dejarme un beso en los labios _¿qué esperas?_

_Una especialización en Educación Superior_ murmure ocultando mis ojos_ quiero enseñar_

_ Excelente idea_

­ _Pero ya iniciaron así que tendré que esperar unos meses_

­

_Puedes aprovechar para ir capacitándote o servirme de consultora con algunas cosas del trabajo. Tu papá quiere hacerme canoso antes de tiempo_

_¡Au! Pobre niño, papi Charlie no te quiere_ bromee_ ¿Qué hiciste para perder su beneplácito?_

_Robarme a su hija bilógica, embriagarla y convencerla de ser mi mujer_

Sacudí la cabeza, negando tal afirmación contuve la risa que bullía en mi garganta. Apague la computadora

_ Creo que no atinas, querido. Hasta donde sé y si la memoria no me falla casi fue al contrario, pero no hubo robo_ dije desde la cocina creyéndome sola _según James yo fui la que rogué como loca_

_Si, pero yo soy el que te persigue como demente_

_Pobrecito, por fin una mujer se te resiste_

_Eh… creo que la palabra a usar es evadir, y no soy yo el que se esconde_ encogí los hombros

_ Según tu madre soy inmadura. Asi que…_

La presa que formaron sus manos sobre mi estomago me hicieron acallar _me gustan así… un reto_ murmuro hundiendo su nariz en mi cuello_ con carácter, con determinación, pero sobre todo ardientes en la cama. Te deseo tanto Bella_ sus manos juguetearon con el borde de la camisa. Sin quererlo gemí.

Cerré los ojos y me permití disfrutar del momento. Me gire para poder besarlo para disfrutar de sus labios, para poder tocar al tiempo que el tocaba de mi. Explorando con ferocidad, palpando su caliente y firme carne. Embriagándome con sus besos.

Eche mis brazos a su cuello urgiéndole por profundizar el beso.

_ Aquí_ murmure contra sus labios teniendo a un los ojos cerrados

_No_ pero sabiendo nuestra urgencia tampoco estaba segura de que llegáramos a una habitación, pero si a la sala.

Su cuerpo cayó sobre el mío en el sofá, entre risas y besos nos fuimos desnudando a la par. Él beso cada parte de mi cuerpo, yo acaricie su espalda y dorso, y juguetee con su erección. Yo mordí su hombro, él torturo el aro de mi ombligo. Yo jadee alto, él rio sobre mi sensible pecho enviando una descarga eléctrica por todo el cuerpo.

Mis manos se enredaron en su cabello con fuerza cuando su boca se encargo de dar placer a centro, cuando cada succión de su boca me hacia gemir, cuando su lengua hacia rodar mi centro. Grite cuando sus dedos embistieron con fuerza dentro de mí. Me removí inquieta tratando de acallar las sensaciones que su boca y sus manos generaban en mi, estaba cerca, lo sabía y él también lo sabía. Mis ojos se centraron en su cabeza enterrada entre mis piernas

_ Dámelo_ pidió mirándome a los ojos. Unos embates de sus mano, y otra succión fuerte y obtuvo lo que pidió más un grito quebrado con su nombre mientras me corría.

Beso mi cuello al tiempo que se ubicaba entre mis piernas y se guiaba dentro de mí. Besos, caricias, movimientos lentos. Nuestros cuerpos iban en un vaivén. Una danza sin música, sin acordes pero con nuestro propio ritmo, carne contra carne, permitiendo a nuestros cuerpos expresar lo que a veces nuestras bocas se niegan a contar.

Acune su rostro entre mis manos para poder besarlo con el mismo ímpetu en que sus embistes rompía en mi

Te quiero

_ Yo te amo_ murmuro. Elevándose un poco para levantar mis piernas a sus hombros y permitir una mejor posición. Mis gemidos se fueron elevando, al incurso en esa posición era más cruda, más profunda y más placentera.

Con los ojos entre cerrados vi como Edward mordía su labio y apretaba sus ojos, los embistes se hicieron más fuertes hasta que solo quede una luz amarilla tras mis ojos, mis piernas fueron dejadas y su cuerpo cayo contra el mío, ahogado su gemido.

Estuvimos abrazados en silencio por un largo y apacible momento. Hasta que él decidió que debía volver a besar, tocar y acariciar mi cuerpo con detenimiento.

_¿Y tu parchecito?_ fue mi turno de morder mi labio con fuerza_ ¿Bella?_

Me incorpore sobre mis brazos_ no lo estoy usando_ admití, no hizo falta que dijera ¿Por qué? Su expresión lo hacía. Sin pensarlo lleve mi mano a la boca, mordí mis uñas varias veces antes de que su mano la apartara

_Isabella_

Mentir, omitir verdades, evadir hechos…. Suspire resignada

_ Puede que este embarazada_ susurre bajito

_ ¿Cómo?_

Quise dármelas de lista y explicarle lo que practicáramos desde diciembre_...entonces la semillita fecunda a la florecita y así se forma un bebé_

_Deja de bromear_ gruño_ te estabas cuidando_

_ Lo estaba_ acepté calma_ sabes no es efectivo. Además no es seguro, las dos pruebas que me hice dieron negativo_

Con esas palabras quise que se aliviara pero no surtió efecto_ ¿Entonces?_

_ Yo… no he tenido…_

_ ¿De cuánto?_ pregunto sin siquiera verme a la cara

_Casi un mes_ susurre más bajo.

_ ¿Por eso de un momento a otro te muestras tan amorosa y comprensiva? ¿Por eso decidiste dormir conmigo, y dejar de tratarme como un extraño?_

Sus preguntas me hirieron. Tenía razón aun así esas palabras hicieron daño. No importo que estuviera desnuda, camine calmada hasta la escalera

_ En la cocina esta la cena_

Tome una de las pijamas de al habitación que usara y me metí en la ducha, no me permití derramar ni una sola lagrima. Una vez lista me dirigí a la habitación que él usara, me metí dentro de la gran cama, dando la espalda.

Desperté sola, solo observar la cama basta para saber que Edward no había dormido conmigo.

No tenía tiempo para lamentarme de nada, me arregle de prisa y corrí a lo de Alice.

Así fueron los días siguientes él se iba temprano y llegaba tarde, no dormía conmigo así que al segundo día opte por volver a mi habitación y permitirle que descansara bien.

La cita con el ginecólogo se posponía, sabía que tenía que ir pero no tenía tiempo, entre los arreglos de Alice, buscar el traje para Edward, y terminar con algunas cosas pendientes de la firma no quedaba tiempo.

El fin de semana no estuvo en casa, yo estuve el sábado esperándole para hablar no llego, el domingo decidí ir a casa de James, al menos allí alguien me haría compañía. Estar junto a mi amigo y su esposo fue un aliciente, las locuras de James podían hacer que un muerto reviviera

_El domingo es la boda de Alice. ¿Acompáñame a por el traje de Edward? El que vi no me gusto_

James dejo claro que Edward, debía ir vestido con un tono muy similar al mío, yo firmemente negué informándole que era el padrino, pero según de él “Ojo de loca no se equivoca” por tanto debía seguir su consejo ya que él tenía mejor gusto que yo y muchas mujeres del mundo.

El lunes nos dedicamos a hacer las respectivas compras. Mis ojos se abrieron de par en par cuando James tomo un traje de gris perla, una camias rosa clara y una corbata vino tinto.

_Edward nunca se pondría una prenda rosa_

_ Pues lo hará, o si no que se ponga una insulsa camisa blanca_

Me cerciore que el traje no se arrugar, de manera cuidadosa lo deje en el puesto trasero de mi auto.

Alice no tardo en acaparar, Rose se sentí mal por lo que la dama de honor tenía que ir al rescate. Ir a la floristería corroborar que los arreglos serian los correctos. Ir a la iglesia y comprobar la disposición de las sillas, volver a la floristería, ir a la empresa de catering comprobar que no faltara nada de la escena de ensayo, menos de la cena de la boda, comprobar los colores y los centros de mesa con las flores escogidas, cerciórame de que el vino fuera el exigido por la pequeña y mandona novia. Ir al ritmo de mi amiga me dejó exhausta.

Un vez en casa pensé en dormir un tiempo, pero fui imposible, mi madre llevo a Ethan como hermana mayor debía cuidar de él, mientras ella y papá iban a una reunión importancia, además de mencionar que mi padre deseaba que organizara la fiesta de san Valentín de la firma

_Ya no trabajo para él_

_ Pero aun eres su hija, yo lo haría pero Ethan exige tiempo. La fiesta es en dos semanas_

Al final asentí. Al menos tendrás en que distraerte.

Pasar tiempo con el pequeño no fue tan malo, dormía plácidamente así que aproveche para dejar el traje de Edward en su habitación con una pequeña nota, luego volví a la sala para ver tele.

El llanto de Ethan me hizo saltar, la carriola estaba vacía con el corazón acelerado fui siguiendo el sonido de su llanto, hasta la cocina. Edward miraba la cocina como si fuera una bestia, y a la vez sostenía a un bebé llorón

_ Ethan_ corrí hasta él y tomo al bebé en mis brazos, arrullándolo con todo mi amor. Susurrándole una de las canciones que mi mamá cantara en mi infancia

_ Te veías cansada_ murmuro Edward_ yo… preparo un tetero ¿creo?_

_Gracias, por cuidarlo, déjame cambiarle el pañal y luego termino de preparar el tete_

Mientras cambiaba el pañal le hice cosquillas en la panza, me asegure de que la cremita antipañalistis quedara bien esparcida, como mamá me había enseñado en las clases pre llegada del bebé ya que Charlie contaba con poco tiempo ella pensó que yo debía aprender. Una vez el pañal estuvo sujeto correctamente volví a ponerle el pantaloncito de algodón.

Al volver a la cocina Edward tenía el tetero bajo el agua, cuando estuvo seguro que no le quemaría me lo tendió

_Esme, explico cómo hacerlo_ explico sentándose frente a mí, mientras Ethan prácticamente lanzaba las manitas a por el tetero, le vi succionar_ quieres algo de cenar_

_No, gracias_ me concentre en el bebé, me gusto verlo tomándose el contenido por completo

_ Tienes que sacarle los gases_

Así lo hice me cerciore de que no quedara un gas que pudiera causar más tarde malestar al bebé. Ethan no tardo en quedarse dormido de nuevo. Con cuidado de no despertarle le lleve de regreso a su carriola.

Sentí a Edward observando atento por un rato, luego se fue. Tuve ganas de llorar por mi estupidez, pero de que valdrían las lagrimas.

Pasadas las once mis padres fueron por el niño. Claro antes Charle decidió que quería algo de beber

_No tengo vino, ni nada de alcohol_ le anuncie antes de que comentar algo_ hay zumo, zumo o agua_

_Agua, mi niña_ le mire m fijamente antes de sacudirme, no me llamaba así desde que cumpliera los quince, antes de los quince era su niña, después de los quince era Isabela_ ¿Eres feliz?_ pregunto mirándome a los ojos cuando le lleve el vaso con agua

_Mucho_ mentí, sin atisbo de duda o emoción

_Me alegro_ nos quedamos en silencio por un momento, mi madre parecía querer rebatir mis palabras lo veía en su ceño fruncido, mi padre solo miraba con concentración el vaso en sus manos_ será mejor que te dejemos descansar_

Les acompañe hasta la puerta, un beso para mi madre, uno para el bebé, un seco adiós para Charlie, quien me sorprendió cuando me abrazo con fuerza y beso mi cabeza como cuando era chiquilla.

El nudo que sintiera en la garganta desde hacía días parecía quemarme. No tenia aliento de moverme demasiado, me deje caer en el sofá, aovillándome, buscado un poco de consuelo en mi misma, y por primera vez en esa larga semana deje que las lagrimas corrieran silenciosas por mi mejillas.

El sonido de la puerta al cerrarse me hizo despertar, me estire con dificultad, todos mis músculos protestaron haber dormido en el sofá. Subí a mi cuarto a arreglarme, mientras me desnudaba para tomar mi baño note que mi panti estaba manchada. Rebusque hasta encontrar bajo el lavabo la caja de tampones.

Tras un nutritivo desayuno. Deje la casa para ir a con Alice y de pasa ir preparando lo concerniente a la fiesta de San Valentín. El frio, y la lluvia no fueron impedimentos para ir a por los zapatos de Alice.

_Rose está teniendo complicaciones con el embarazo_ comento Alice con preocupación cuando dejamos la zapatería_ Emmett está asustado. Así que vamos a ir a verla, ella no quería contarnos nada para no “empañar” mi alegría, pero para mí es más importante la salud del bebé y de ella_

_ No es nada_ aseguro una alicaída Rose_ solo que este pequeño quiere ver a los papis ya_ la sonrisa en su rostro pareció iluminarle_ para la boda estaré bien, eso si el padre dispensara que pase la mayor parte del tiempo sentada, y no creo que me este demasiado en la fiesta_ se excuso

_Serás tontina, claro que no dejaremos que se cansen demasiado_ prometió Alice.

Rose aseguraba que el bebé estaba ansioso por nacer, pero los médicos había ordenado reposo total, cero emociones fuertes si quería que el bebe no se adelantara demasiado. Ese día lo pasamos juntas, mimando a nuestra amiga, haciéndola reír con las ocurrencias de Alice en el catering. Comentando sobre el embarazo de René que también fuera complicado los primeros meses. Incluso hasta aportaron ideas para mi tarea de organizadora de la fiesta de San Valentín

_ Pero ya no será San Valentín_ se quejo Rose más animada_ prácticamente será inicio de Marzo_

_Ordenes son ordenes_ murmure_ ponte bien, para que hagas sufrir a Emmett ese día_

_Ya ha sufrido mucho, creo que no duerme temiendo que el bebé no aguante más. Hasta tiene la pañalera en su auto, hoy no ha venido porque saben que están aquí, pero les aseguro que puede se molesto verlo pasearse como un perrito en día de lluvia_

_ Cualquier hombre que ame a su mujer haría eso _ comentó Alice_ si cuando le dijiste del embarazo casi se vuelve loco de la alegría_ sentí envida, no de la buena por las palabras de Alice_ duro casi un mes repartiendo abrazos y besos y gritándole al mundo que sería papá_

_ Yo tengo que frenarlo porque todos los días quiere comprar algo para el bebé, ropa, juguetes, Dios creo que hasta una casa le compraría de lo emocionado que esta_ Mis ojos se llenaron de lágrimas, estaba celosa y envidiosa de mi amiga, de la felicidad que compartía con novio, de la reacción de Emmett. Quería un poco de esa alegría, sentirme querida. No oía a mis amigas.

Me levanté sin decir nada me marche. Dentro del auto solloce, parecía que las lagrimas de la noche solo fueron el principio. Era poco lo que veía por las lágrimas, además pareciera que el clima estaba acorde a mi estado de ánimo. Conducía superando el nivel permitido, queriéndome sentir libre de algún mondo, queriendo ahuyentar las lagrimas y el dolo en mi pecho. Tome mi móvil y marque entre sollozos a la única persona con la que podía desahogarme. Me distraje marcando cuando levante la vi el auto tratando de adelantar al otro, era demasiado tarde para evitar el choque, pero no lo suficiente para dar un volantazo y frenar para evitar la colisión contra la baranda de seguridad. El golpe aturdió mi mente pero aun así no sentí dolor, solo descanso.

Tarde… tardísimo pero aquí estoy, este capítulo se lo dedico a todas las lectoras de este blog, a las que comentan, a las anónimo, a aquellas que leen y no comentan pero disfrutan de nuestras historias. Gracias por acompañarnos aun cuando nuestras ocupaciones nos alejan un tiempo. Gracias por la paciencia. Mi anuncio parroquial, que rico es sentirme amado, pero es mas emocionante que nosotros mismo nos amemos, que cuando te ves en el espejo sonrías y te des cuenta de lo mucho que vales como eres y no como muchos quieres que sean.

Ada