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Gracias por tu visita, los fics que se publican aquí son salidos de mi imaginación, con los personajes prestados de la gran Meyer… te agradecería que me avisaras si ves algún fic mío publicado por la web, eso se llama plagio y hay que combatirlo. Gracias!

Te toma muchos minutos leer un capitulo? Entonces puedes tomarte un minuto para comentar, no pido nada más. Escribe que algo dejas y lee que algo llevas.


Capitulo 11: Despejando mis miedos

Hola amigas!!... acá les dejo el siguiente capi de este fic... para las que quieren más acción les digo... ya va a venir, paciencia y para las que quieren Lemmon aquí lo tienen. Besos y dejen sus comentarios...

Despejando mis miedos

Debía llegar a él, debía explicarle… tenía que hacerlo si no quería que por un malentendido, más bien por una estupidez mía, el sol de mi vida, mi ángel desapareciera. Manejé hasta su casa bajo la lluvia y en la oscuridad, y al doble de la velocidad con la que usualmente conducía, era la peor locura que había hecho por alguien y la angustia estaba a flor de piel. Cuando estacioné frente a su casa me embargó el miedo… alguien abrió la puerta del auto y lo vi, parado bajo la lluvia mojado de pies a cabeza y con una mirada cargada de angustia y pena… se me derrumbó el cielo y me quebré. Me arrojé a sus brazos como quien se aferra a un trozo de madera en la inmensidad del océano y lloré.

Lloré por lo que ví en sus ojos, jamás me había propuesto lastimarlo y ahora lo estaba haciendo, lloré por los recuerdos y los miedos que sacudieron mi razón, no quería pasar por eso de nuevo… un rompimiento, y menos con Edward, él era la razón de mi existir. Lloré por lo que él podía llegar a creer de mí, por lo que había pensado y sobre todo… lloré por desesperación… por besarlo y por decirle que todo iba a estar bien, borrarle esa mirada de la cara, me destruía verlo así.

Me cargó en sus brazos y me llevó dentro de su casa, la cual estaba en penumbras y sin el resto de la familia, se sentó en el sofá conmigo en su regazo y me acunó acariciando mi espalda,

_¿ Amor… ¿qué te puso así?...¿a caso crees que hiciste algo mal?_ me dijo al oído mientras yo me aferraba a su pecho,

_Edward… siempre hago algo mal… ya me pasó antes_ dije aún sollozando sin atreverme a mirarlo a los ojos. Esos ojos que tanto decían aunque callaran sus palabras. Pasaron unos minutos en los que ninguno de los dos dijimos nada, el seguía con su mano acariciando mi espalda y yo aferrada a su pecho. Luego me levantó una vez más y me llevó por las escaleras hacia su habitación, no había luces encendidas tan solo la penumbra de la noche cerrada, me tumbó delicadamente sobre su sofá y acarició mi frente arrodillándose a mi lado.

Esa noche más que nunca quería estar con él, quería demostrarle cuánto lo amaba, quería entregarme completa por amor a él… sin importar lo que sucediera, si debía morir quería morir en sus brazos, con sus besos y todas las sensaciones que él me pudiera regalar… la muerte podía llevarme, si… pero él se quedaría con mi corazón y mi alma.

_Edward… quiero quedarme contigo esta noche…_ le dije casi con desesperación. Él me miró por un momento y luego me besó dulcemente hasta que respirar se hizo urgente.

_Si mi amor… hoy te quedaras aquí…_ me dijo en un susurro, le sonreí tenuemente y rodeando su cuello con mis brazos lo bese apasionadamente. Nuestras lenguas danzaban en nuestras bocas sin parar y mis dedos se enredaban en su cabello atrayéndolo más a mí. Mi cuerpo se estremecía con cada roce de nuestras pieles y jadeaba cuando con una de sus manos comenzó a acariciar mi mejilla bajando por el cuello lentamente. Se separó de mí cuando notó que me urgía respirar.

_Iré a ver a Alice… sácate esa ropa mojada, te traeré algo…_ me dijo con la mirada oscurecida.

Cuando cerró las puerta tras él me levanté de la cama algo mareada y me dirigí al espejo que había en la puerta de closet, me miré por unos segundos, la luz de la luna que se asomaba por entre las nubes oscuras iluminaba sutilmente la habitación, no había notado en qué momento había dejado de llover, distinguí las ojeras debajo de mis ojos y los parpados hinchados por haber llorado, mi cabello húmedo caía detrás de mi espalda algo enmarañado, no esperaba verme así en la primera noche que pasaba con mi novio pero no podía hacer nada, solo esperar que de todas formas él me encontrara hermosa. De a poco me fui sacando la ropa y tirándola a mi lado, la escasa luz de la luna era mi aliada que iluminaba mi cuerpo casi desnudo, me terminé de desvestir quedando cubierta solo por mi ropa interior, me miré al espejo insegura… Edward era la perfección en persona y yo solo una simple humana corriente, reflejé mis inseguridades en la imagen de mi que me devolvía el espejo… ¿le gustaré?... ¿él me deseará tanto como yo lo deseo a él?... me preguntaba mientras con las yemas de los dedos recorría la piel de mi abdomen subiendo hasta el borde de mi sostén, subí hasta el centro de mi pecho y rocé la línea de mis senos que sobresalían sutilmente hasta llegar a mi hombro. Entonces un frío aliento rozó la piel de mi cuello por detrás, me estremecí y busqué su mirada en el espejo… sus ojos recorrían mi cuerpo y me agradó al ver que estaban oscurecidos por el deseo. Bajé mi mano a mi costado y él alzó la suya, sus dedos comenzaron a subir desde el borde de mi tanga en mis caderas recorriendo la orilla hasta mi bajo vientre, me estremecí al sentir sus dedos fríos sobre mi piel, sin embargo eso provocó un hormigueo en mi entrepierna muy agradable, su aliento golpeaba todos mis sentidos haciendo que mi corazón palpitara peligrosamente.

Sus dedos siguieron el camino hasta mi ombligo y luego subieron por mi abdomen repartiendo sensaciones únicas, ambos nos mirábamos en el espejo aunque su mirada estaba clavada en otras partes de mi cuerpo. Posó delicadamente su mano en el centro de mi pecho, donde mi corazón latía desbocadamente y vi que cerraba sus ojos sintiendo, luego de unos segundos prosiguió su recorrido pasando por la parte superior de mis senos que se asomaban agitados por mi respiración, de un lado él aspiraba detrás de mi oreja y del otro lado su mano se posaba sobre la vena punzante de mi cuello. Entonces entreabrió su boca y la posó suavemente sobre la piel de mi cuello, sus ojos aún estaban cerrados y mi respiración se volvía aún más agitada, su lengua saboreaba mi piel mientras yo jadeaba cerrando los ojos, su aliento me estremecía de placer, con una de sus manos levantó mi cabello y su lengua acaricio mi nuca, era exquisito y tan perturbador que sentí que mis piernas temblaban ante ese contacto, tenía miedo de caer. Me estaba resistiendo de sobremanera de darme vuelta y besarlo salvajemente, le daría su tiempo, sabía que esto era un gran esfuerzo para él.

Entonces cuando aún besaba mi cuello, su mano soltó mi cabello y bajó por mi abdomen hasta la orilla de mi tanga, era exquisito verlo hacer esto por el espejo… sentía una enorme satisfacción ver cómo mi cuerpo reaccionaba ante sus caricias. Su mano se coló por la tela de mi tanga bajando hasta mi centro, yo solté un gemido cuando noté su dedo sobre mis labios abriéndose camino, él gruñó por lo bajo y metió aún más sus dedos dentro de mí… mi cuerpo entero tembló ante estas sensaciones, me lo había imaginado muchas veces dentro de mi pero de esta manera me estaba matando, era enloquecedor. Comenzó a frotar mi sexo con sus dedos introducidos hasta lo más hondo mientras yo soltaba gemidos de placer y arqueaba la espalda, entonces pude sentir su dureza debajo de su pantalón, entre mis nalgas haciéndome gemir aún más, con la otra mano liberó mis senos del sostén y comenzó a acariciarlos haciendo que su pulgar rozara mis pezones endureciéndolos, sus dedos siguieron haciendo su trabajo en mi sexo frotándolo de tal manera que sentía que iba a estallar en cualquier momento.

_Ed.. ward…_gemí, la habitación comenzaba a dar vueltas así que cerré los ojos y me concentré para que mis piernas no me traicionaran y se doblaran. Comencé a mover en círculos mi pelvis cuando sentí que estaba por terminar, sentía su dureza entre mis nalgas y Edward solo me apretó más a él, nuestros cuerpos se frotaban desesperadamente. Levanté mi brazo hacia atrás agarrando su nuca con mi mano, nuestros cuerpos se fundían tan perfectamente, con movimientos sincronizados nos frotábamos y nos tocábamos, una de sus manos en mis senos, la otra en mi sexo moviéndose aún más rápido y presionando su dureza y su boca gimiendo en mi cuello…

Mi cuerpo comenzó a temblar respondiendo a sus caricias y mi sexo estalló de placer, el orgasmo llegó y mi grito inundó la habitación y él gimió aún más sobre mi hombro, los espasmos me recorrían mientras él me sostenía y entonces mis piernas me fallaron y se doblaron… me sentó suavemente en el suelo rodeándome con sus brazos mientas jadeábamos al unísono, apoyé mi cabeza en su hombro y descansé. Él me sostuvo abrazándome contra su pecho…

_Bella… te amo tanto…_ fue lo último que escuché

Abrí los ojos y me encontraba tendida en el sofá de cuero negro envuelta con una manta, busqué a Edward con la mirada y no lo encontré, entonces decidí levantarme.

_No Bella… es demasiado temprano_ dijo la voz aterciopelada de mi novio desde el gran ventanal, luego me miró y se acercó despacio hasta mi. Le dejé lugar y se recostó a mi lado,

_¿Qué hora es?.._ le pregunté preocupada, era día de trabajo y todavía tenía que ir hasta mi departamento a cambiarme la ropa.

_Son las 6 de la mañana… todavía es de noche. No te dejaré ir…_ me dijo acariciando mi mejilla con una de sus típicas sonrisas, yo sentí que me sonrojaba y bajé la mirada,

_...mmm… cómo me gusta eso_ me dijo alzando mi barbilla y dándome un beso, su contacto me hizo recordar lo que había sucedido la noche anterior y me escondí en su hombro

_Oh Edward... anoche ...tu familia..._ dije avergonzada,

_No Bella... anoche se fueron a cazar y nos dejaron a solas,_ me calmé al escuchar sus palabras, entonces alcé mis brazos envolviendo su cuello y lo besé. Fue un beso apasionado y dulce a la vez, ambos éramos concientes de que cada vez era mucho más fácil estar juntos físicamente, sus manos recorrían mi piel aún desnuda sin ningún pudor y yo bajé una de mis manos para desabrochar su camisa pero él me separó delicadamente,

_Bella… _ me dijo suplicante,

_¿qué?... ¿me vas a decir que aún te es difícil estar cerca mío?...¿aún después de lo de anoche?_ le pregunté algo ansiosa.

_No… es solo que no bebemos tentar a la suerte, yo todavía tengo… miedo a dañarte… entiende_

Lo miré por unos instantes mientras él se acurrucaba a mi lado abrazando mi cintura, estuvimos un largo momento sin decir nada, yo no quería dormir… era tiempo de hablar y aclarar algunas cosas,

_Edward, ayer lo que sucedió fue que…_

_ Shh… no importa lo que sucedió, lo que me importa es que ahora estás aquí conmigo_ me dijo al oído.

_ Si… pero yo no sabía que habías vuelto, igual eso no justifica el hecho que yo me haya quedado por más tiempo del que hacía falta, eso lo sé… sin embrago…. Solo fue que se me pasó el tiempo y …_ no sabía como justificarme, no podía admitir frente a él que me había agradado la compañía de Jacob… eso no se lo diría.

_Bella, sé que te entretuviste, a demás tienes razón… no sabías que yo había regresado…. De todas formas no quiero que te sientas ni que pienses que por mí debe terminar tu vida social, yo soy tu novio y quiero compartir tu vida pero no dejaré que tú te abstraigas y la dejes de lado por mí._ me dijo mirándome a los ojos.

_Lo sé, no merezco que seas tan comprensivo… lo siento._ le dije acariciando una de sus mejillas. _Es solo que soy algo insegura, me dio miedo… yo… temí perderte por una estupidez así. No podría soportar algo así… no otra vez_ ante esas palabras sentí cómo se tensó.

_Mi amor… sé que algo te sucedió… que te hirieron y que por culpa de esa persona ahora te sientes insegura, yo no soy capaz de permanecer lejos de ti… eres mi droga, grábatelo en la cabeza… te amo… mas que a nada en el mundo y te costará deshacerte de mi…_ me dijo riendo y me besó._ yo quedé aturdida ante esas palabras, fui una entupida al darle importancia a mis inseguridades…. Una entupida al pensar que él podía dejarme, nuestro destino era estar juntos y yo ya lo había decidido… quería estar con él para siempre, para toda la vida, deseaba con toda el alma ser su igual, su compañera, su mujer. Ese sería de ahora en más mi objetivo, hacerlo feliz sin importar cómo, sin dejar que nadie se interponga en nuestro destino, no permitiría que esa mirada de pena que le había visto la noche anterior le nuble la visión de nuevo… quería hacerlo feliz aunque eso me costara la vida.

7 comentarios:

Anónimo dijo... [Responder]

Wao Wao, me encatas kiero mas lemmon sigue asi, deberias tener mas dias para publicar de estos cap. jajajaja...me gutarias k me agregras a tu mail y facebook, yiselt26@hotmail.com, República Dominicana...me encata como escribes.... besosssss...

Anónimo dijo... [Responder]

Ahhhh otra cosa ese cap. esta muy cortito, jajajja lo kiero mas largo de verdad no me canso de saber de mi hombre Edward, lo amo mas k a mi esposo, jajajjaja, es mi droga......

Unknown dijo... [Responder]

El deseo, la pasión, el amor necesidad del ser son. Ser y no ser lo es todo y por todo lo que es el ser estás tú mi Lullaby, déjanos pues ser para así contigo poder llegar a tocar en las puertas de ese cielo, ese nuestro cielo personal que eres tú. Besotes miles

carla cullen dijo... [Responder]

Hola mi preciosa Lullaby!!
Nuevamente me has dejado con ganas de màs!!jaja
siento verdadera admiraciòn en la facilidad y talento que desbordas al escribir el lemmon!! me encanta!! ups..eso sonò medio mal ¿verdad? nahhh!! total si lo sabe Dios que lo sepan todos soy una pervertida!!jajaja
Te enviò miles de besos vampìricos y espero ansiosa el siguiente capi!!
Nos leemos pronto tu amiga por siempre CArla!!

Anónimo dijo... [Responder]

hola soy ianix cullen adoro tus fan fic amo tu forma de escribir seria muy chebre que me agregaras chicane.1@hotmail.com

algo que es nada!! dijo... [Responder]

muy padre.. kiza te hace falta que le metas mas candela a tus encuentros con edward jajja

ERIN dijo... [Responder]

Cariño que super capi, ufff no te imaginas cuanto calor provocas con tus letras, jajajaja, no enserio fu muy sensual tantas caricias frente al espejo. Tambien hubo mucha dulzura por parte de Edward llenandola de seguridad haciendole saber que siempre iba a estar para ella que era lo primero en su, digamos, vida.
Me en~can~ta este fic, lastima que ya tengo que dejarlo por hoy.
Nos leemos nuevamente el lunes.
Besos.