Capitulo 29: Reencuentro

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Capitulo dedicado a mi compañera de tardes y mañanas, te quiero mucho Manoli (Electrica Cullen Black) gracias por tu amistad y tus palabras...

Reencuentro

Mi corazón muerto dio un salto cuando sus ojos se abrieron fijando la vista en el techo, parecía no moverlos sin embargo tardé unos segundos en comprender que en realidad estaba tan abrumada por lo que veía con su vista periférica que no podía pensar, no podía moverlos y ni siquiera pestañear… aunque ya no lo necesitara.

“Déjala que se acostumbre a lo que la rodeé, debe estar abrumada por las sensaciones…” el pensamiento de mi padre llegó a mí aplacando la urgencia de llamar su nombre o besarla… tenía aún su mano entre la mía, pero ella parecía no darse cuenta aún. Asentí suavemente a la sugerencia de mi padre mientras la veía mirar fijamente el aire que tenía a su alrededor, inhaló por la sorpresa de encontrarse con que tenía una muy fina visión. No podía leerle la mente pero definitivamente podía ver hacia donde se dirigía su mirada, podía comprender lo colmada que debía sentirse, lo mismo que yo sentí al despertar hace ya casi cien años… la misma sensación de poder ver cada detalle de lo que alrededor sucede, el mismo atiborramiento de los sentidos al captar todo a la vez… los efluvios, los colores… algunos que con el ojo humano no pueden ni siquiera concebirse, la sensación de libertad al llenar de aire los pulmones y no necesitarlo para nada, los nuevos sabores palpables en el aire, la incredulidad… la quemazón.

¡Qué hubiese dado por haber podido leer su mente en ese momento?! ¡Todo…! La veía simplemente allí, asimilando poco a poco todo lo que estaba a su alrededor, aspirando una vez más el aire seguramente sintiendo los olores más cercanos a ella… el dulce efluvio de Alice en una mezcla de canela y lavanda, el de Jassper una sutil mezcla de musgo y manzana, el de Esme un efluvio parecido al Jacinto y el chocolate y el mío… Reconociéndolos, registrándolos en su sistema, haciéndolos reconocibles y palpables para toda la eternidad.

Ladeó levemente la cabeza cuando se percató de los ruidos, inaudibles para un humano… aunque tan fuertes resonando en su oído, el corazoncito de mi hija en el piso de abajo, el bobear grave y pesado del corazón del licántropo, los sonidos provenientes de la carretera, los del bosque cercano a la casa.

Sutilmente le di un apretón a sus dedos, que ahora tenían mi misma temperatura… cálida, aunque no tanto como cuando la sangre corría por sus venas calentando su cuerpo. Ante ese leve contacto el cuerpo de Bella se tensionó, aspirando una vez se envaró levantándose de la mesa acuclillándose rápidamente contra la pared con actitud defensiva, alejándose de mí. Un siseó salió a través de sus dientes que sobresalían de sus labios recogidos… me alarmé ante ese inesperado movimiento, tan fugaz que no le había llevado ni un segundo hacerlo,

“No la aturdas, ella comprenderá, estoy listo por las dudas” reconocí la voz de Jassper susurrándome en mi cabeza pero mis ojos y todos mis sentidos estaban alertas a ella, que me veía por primera vez desde su posición defensiva, pronto comprendió ante quiénes se encontraba y relajó su postura tan rápidamente como la había llevado a cabo.

Yo aún estaba en la misma posición con la mano alzada en la misma posición que cuando sostenía la suya… muriendo de ansiedad, desesperación y expectante a su siguiente reacción, viéndola renacer como una bella flor… ¡Más que eso! ¡Mucho más!, porque a pesar de que trataba de encontrar un calificativo para describir a la diosa magnifica que tenía ente mis ojos, ninguna palabra en este mundo inventada desde los albores de la humanidad hasta ahora podía describirla como lo que realmente era… una belleza inigualable, insuperable y… gloriosa. Entonces al verla frente a mí, mirándome como si nunca lo hubiera hecho con sus ojos humanos, la vi… y pensé ¿qué era lo tan maravilloso que yo había hecho en esta vida o en otra que ahora me hacía merecerla?, ¿haber sido un buen hijo?, ¿haberme arrepentido por haber asesinado tantas veces? ¿Amarla hasta perder la cordura?... si, seguramente era eso, lo único bueno que en esta maldita vida había hecho fue haberla amado siempre, aún cuando en un principio me lo negaba a mí mismo… aún cuando mis ansias y deseos de matarla eran más grandes que mi deseo de amarla.

“Está reconociendo todo, dale tiempo hijo… es necesario, sé paciente” decía la voz mental de mi padre como si lo que tuviera que hacer era sentarme allí cruzado de brazos como si eso fuera lo más normal del mundo… ¡No, por supuesto que no!, ella era lo más importante de mi mundo!... no podía solo verla desconocerme, porque eso era lo que estaba sucediendo, ella parecía no reconocerme y eso me mataba de la ansiedad…

“Edward entre tú y ella no podré soportarlo… contrólate por favor” , traté de serenarme ante el pedido de Jasper, él tenía que poner toda su concentración en mi Bella pero yo solo estaba allí entorpeciéndolo todo.

“Ella esta serena… regocijada, impresionada, es… increíble, solo siente un profundo amor”

Las palabras de mi hermano en mi mente era un alivio, ¿a caso yo le inspiraba amor? ¿A caso aún seguía mereciéndola?...

Ese aparente amor me empujó a hacer algo sin medir las consecuencias, si moría allí en sus manos sería lo mejor que me sucediese ante que su lejanía, rodeé, aún con mi mano extendida, la mesa de operaciones que se había convertido en su pira ardiente y me acerqué a ella convencido de que si su amor era tan fuerte como Jasper lo había sentido… tal vez lo considerara antes de matarme. Ella seguía cada uno de mis movimientos con sus nuevos ojos, tan rojos como la más fresca sangre, ya delante de ella me detuve confiando en que no me odiara,

_¿Bella?_ murmuré ansioso en voz baja, mi preocupación se dejó entrever en el tono de mi voz, ella me miró sin decir palabra… como admirando cada detalle de mi rostro como si no me conociera… ¡Maldita muralla que no me permitía leerle la mente! ¡Cómo lo anhelaba en ese momento!

_Bella, ¿amor? Lo siento, sé que esta desorientada. Pero estás bien. Todo está bien_ entonces su semblante cambió en cuanto yo dije mis últimas palabras, lo que llevó a maldecirme internamente,

“Está preocupada, siente ansiedad por varias cosas… pero está controlada” dijo mi hermano en su mente, parecía que en segundos Bella podía experimentar un abanico de sensaciones… estaba más que claro que el temperamento de un vampiro neófito podía cambiar radicalmente en solo fracciones de segundos.

Entonces me acerqué a ella y con la mano que aún sostenía en el aire acaricié suave y lentamente su mejilla, me maravillé de lo suave que se sentía, aún más que en su forma humana… una mezcla perfecta a satín y el toque de una pluma. Mis dedos recorrieron su pómulo derecho y cuanto lo hice, una electricidad familiar se extendió desde la punta de mis dedos hasta el centro de mi estómago… tan familiar que remembranzas de la Isla Esme y de nuestros días allí vinieron a mi mente, Bella solo necesitaba sentir que yo estaba allí para ella, como desde un principio, tenía la leve esperanza de que ese hecho la ayudara a reaccionar adecuadamente, o eso quería creer yo.

“Es… wau, es simple y llana lujuria lo que ella siente ahora Edward… es deseo, anhelo, ¿Qué le estás haciendo?” esas palabras de Jasper me colmaron el corazón… ¿ella me deseaba? ¿Ella se sentía atraída de esa manera por mí? ¿Podía ser eso posible?, en cuestión de segundos había cambiado todo lo que creíamos imposible para un vampiro neonato… claro, tratándose de Bella, las sorpresas estaban consideradas.

Ella me miraba fijamente con sus ojos conteniendo un brillo especial, uno del que no me había percatado, pero aún su voz no me decía nada. Arqueé una ceja invitándola a que al menos me diese una señal de lo que ella pensaba, podía tener una descripción perfecta de sus emociones y sentimientos gracias a Jasper pero… ¿y sus pensamientos?, creí por un momento, por un ínfimo instante tuve la esperanza de que su cambio traería una posibilidad para mí de poder acceder a sus pensamientos pero, nada en ese aspecto había cambiado… su mente era un secreto guardado a siete llaves.

Entonces en lo que dura menos de medio segundo, ella hizo un movimiento que no vi venir… se abalanzó hacia mí rodeando con sus brazos mi cintura y recostando su cabeza en mi pecho, eso era lo que yo quería, pero… con una Bella que pudiera controlar su fuerza, de repente tuve la sensación de que era abrazado por el cuerpo de una boa constrictor, suavemente la aparté de mi torso y la miré a los ojos,

“No la rechaces… está súbitamente angustiada, no la asustes, está confundida” ante las palabras de Jassper me apresuré a aclararle la situación,

_Uhmm… con cuidado Bella, auch_ murmuré haciendo una mueca, ella enseguida apartó sus brazos y los escondió detrás de su espalda,

_Ups_ dijo con sorpresa, entonces comprobé que su suave voz había cambiado junto con ella, había sido básicamente una pequeña expresión de su voz, pero… fue como música para mis oídos, cristalina y perfecta… casi podía perderme en ella, casi podía imaginarme frente a un celestial ángel, sonreí ante esa imagen que ella me regalaba,

_No te asustes amor_ dije acariciando sus labios con mis dedos anhelantes por su contacto _tan solo eres un poco más fuerte que yo por el momento_ continué acariciando su suave mejilla embelesado por esa suavidad que me hacía estremecer, ella se calmó visiblemente ante mi toque… era increíble sentirse así, deseaba tocarla ahora que podía hacerlo sin reparos ni cuidado alguno, pero no sabía sobre su reacción si me atrevía,

“Edward…” la voz de advertencia de Jasper resonó en algún recoveco de mi mente “no lo voy a poder manejar… destila… demasiado… deseo, no la toques de ser necesario… realmente no sé cómo cambian tan inesperadamente sus estados de ánimo”

Por un momento sentí pena por mi hermano y sabía que después iba a tener que soportar sus escapadas con Alice, pero ahora lo necesitaba a lado de mi Bella para que al menos pudiera saber cuáles eran sus reacciones ya que yo finalmente no podía leer su mente.

Ella se perdió en mis ojos disfrutando de mi caricia, jamás dejaría de tocarla… esa sería de allí en más mi única fijación, sentirla sobre mi piel. Bella alzó lentamente su mano derecha que aún tenía detrás de la espalda y con sus ojos fijos en mí acarició con un suave roce de sus dedos perlados, la piel de mi mejilla… me sentí morir, esa tan característica descarga eléctrica silbaba de las puntas de sus dedos atravesándome la piel y llegando hasta mi corazón como si pudiera resucitarlo, siguiendo su camino por cada terminación nerviosa hasta el centro de mi cuerpo… cada minúscula célula reaccionó despertando al fin del letargo y anhelando tocarla… deseándola con un hambre ilimitado. Ella clavó sus ojos en los míos y movió sus labios,

_Te amo_ murmuró, su voz repiqueteó por toda la habitación como el canto de una campana, mi pecho se embargó de felicidad y no pude más que sonreír ante esas palabras… ¡Maldición! ¡Bella me amaba!... aún después del suplicio que le provoqué con mi irresponsabilidad, aún después de haberla convertido a esta endemoniada vida ¡ella me amaba!... ¿qué podía suceder de allí en más que entorpeciera esa felicidad? ¡Nada… Maldición… nada!

_Como yo ti_ dije sin poder decir más, tomé su rostro entre mis manos y me incliné hacia ella suavemente recordándole que debía tener cuidado, mis labios rozaron los suyos con un suave roce primero pero… yo quería más, ¡la quería toda ahora que podía! Y no pude evitar dejarme llevar nuevamente por el deseo, moría por probarla por lo que la besé con un fuerza repentina… con fiereza… con lujuria, porque era todo lo que su cuerpo me hacía sentir, era todo lo que mi cuerpo pedía.

La besé como nunca la había besado, como siempre había querido… la besé sin contenciones ni reparos, sin recordar lo que teníamos alrededor, acariciando su lengua con la mía, jadeando ambos por el placer que aquello nos provocaba, ensamblando nuestros cuerpos como lo que éramos, pertenecientes el uno del otro… entremezclando nuestras salivas como si con ello pudiéramos hacernos uno eternamente, saboreándonos y degustándonos en esta nueva vida… ¡ella me hacía vibrar maldita sea! ¡Me excitaba, me saciaba y me volvía loco!

“Ya Edward por dios!... no podré resistirlo, pueden hacerlo luego y lejos de aquí!” me percaté de la presencia de los demás, de la existencia del mundo… cuando los pensamientos de Jassper llegaron a mi mente.

“Wou hermano, ya… basta, apiádate de mí, Rose esta con Nessie y no se separará de ella por un buen tiempo” los pensamientos de Emmett seguidos por un carraspeo por su parte nos hicieron reaccionar, Bella separó sus labios de los míos y reí entre dientes ante lo que le estaba haciendo a mis hermanos. Bella, percatándose de la situación en que estábamos dio un paso hacia atrás, inevitablemente di ese paso con ella aferrado a su cintura, si me separaba de ella quedaría a la vista los niveles a los que había llegado mi excitación. Mi esposa inhaló, como si lo necesitara, un trago de aire para recuperarse, me sentí satisfecho al saber cómo había podido aturdirla de tal manera… ¡Y tan solo con un beso!

_Te has estado conteniendo antes por mí_ me acusó con voz cantarina y sus ojos entrecerrados, ¡Claro que me había estado conteniendo! ¿Qué a caso no me conocía?, reí a carcajadas ante su conclusión

_Entonces era necesario_ respondí recordándole _ahora es tu turno de no hacerme pedazos_ reí nuevamente, sentía un gran alivio al saber que ahora ella era poderosa, que ya nada la destruiría.

“No puedo creer el control que demuestra en sí misma, quisiera… hablar con ella” los pensamientos de mi padre eran inquietantes. Sin pensarlo dos veces Carlisle vino a nosotros sabiendo que la situación ahora era distendida, Jassper vino detrás de él solo por precaución… de todas maneras yo la tenía entre mis brazos, jamás se escaparía de allí… jamás.

_¿Qué tal te sientes Bella?_ ella pareció pensarlo por una milésima de segundo

_Abrumada_ murmuró _hay demasiado…_ su voz se desvaneció como si estuviera descubriendo algo más de esta nueva vida

_Si, puede llegar a ser bastante confuso_ dijo mi padre, ella asintió rápidamente

_Pero sigo sintiéndome yo misma, o al menos algo parecido. No esperaba eso_ dijo extrañada, yo apreté mi agarre alrededor de su cintura,

_Ya te lo dije_ murmuré para ella, en contadas ocasiones me había mostrado su inseguridad ante su manera de actuar luego de su transformación… y eso al fin saltaba a la vista, seguía siendo ella misma, mi Bella… la Bella de la que me enamoré

_Estas muy controlada_ murmuró mi padre _mucho más de lo que yo esperaba, incluso contando con todo el tiempo que has tenido para prepararte mentalmente para esto_ ella pareció pensar en sus palabras por un instante antes de responder

_No estoy tan segura de eso_ dijo por lo bajo, mi padre asintió con serenidad, aunque su mente era un torbellino de preguntas que deseaba lanzar todas al mismo tiempo,

_Me parece que hicimos bien con la morfina. Bella… ¿qué recuerdas del proceso de transformación?_ ella pensó por un minuto y la sombra de la duda ensombreció su rostro, aún inmortal ella era como un libro abierto…

_Lo recuerdo… muy borroso. Me acuerdo de que el bebé no podía respirar_ su voz se cortó abruptamente al recordar, fijó sus ojos en mí asustada

_Renesmee está sana y muy bien_ prometí recordando a nuestra pequeña niña que nos esperaba allí abajo anhelante de conocer a su madre ahora que volvía a escuchar su voz… era increíble cómo la esperaba, como la reconocía… _ ¿qué recuerdas después de aquello?_ murmuré sabiendo que faltaba poco para que se reencontraran. Bella pensó por un momento antes de contestar,

_No es fácil acordarse. Había una completa oscuridad. Y entonces… abrí los ojos y pude verlo todo_ la miré extrañado… en el medio de toda esa sencilla explicación algo estaba escondido, podía verlo en su rostro, en su fingida despreocupación… aún la conocía, conocía el talento de ella para los embustes.

_Sorprendente_ musitó mi padre, él tenía la certeza de que Bella estaba en lo cierto, cavilaba una y mil veces cómo había sido el procedimiento, despejando aún así las dudas que lo estaban afligiendo.

“Edward… algo anda mal, siente disgusto con ella misma, siente vergüenza por algo que no puedo ver…” estaba de acuerdo con las afirmaciones que Jassper arrojaba en mi mente, pero decir esas inquietudes sería alterar su ambivalente temperamento

_Quiero que pienses, que me cuentes todo lo que recuerdes_ presionó mi padre entusiasmado, en seguida Bella se incomodó… una mueca de preocupación cruzó su rostro, arrugó su frente y tragó en seco demostrando que algo más invadía su concentración _Oh, lo siento Bella_ se disculpó rápidamente Carlisle _seguro que debes sentirte incomoda con la sed. Esta conversación puede esperar_ claro… era la suposición más acertada, la quemazón que la sed le provocaba. Había olvidado, hasta que mi padre lo recordó, la necesidad quemante que Bella debía estar experimentando con la sed torturando su garganta mientras nosotros allí indagando sobre su experiencia. Ella inmediatamente llevó una de sus manos a su garganta aferrándose a ella como si de esa manera pudiera calmar su abrasadora quemazón desde el exterior. Dejé caer mis brazos de su cintura, sabiendo que más tarde la tendría solo para mí, tomé una de sus manos y jalé de ella,

_Vamos a cazar, Bella._ dije apremiante, no quería extender su sufrimiento. Ella enseguida me miró con sus ojos como plato, sorprendida ante mi pedido, sonreí para darle ánimos ¿aún con su nuevo cuerpo, siendo tan poderosa creía que no iba a poder hacerlo?

_Es muy fácil amor, casi instintivo, así que no te preocupes… yo te enseñaré todo_ murmuré con calma, al ver que no se movía le sonreí incentivándola… no podía saber sus pensamientos y eso me ofuscaba, levanté las cejas expectante, su reacción me desesperaba _siempre tuve la impresión de que te hubiera gustado verme cazar_ dije inquieto. Me sorprendió cuando ella estalló en una melodiosa risa, claro que lo recordaba y ante la confirmación de verme cazar como si fuera una invitación a un gran evento no hizo más que reír… la vi feliz por primera vez desde que sus ojos humanos habían visto por primera vez a nuestra hija, como aquella vez que nos prometimos amor eterno o como cuando le dije por primera vez que la amaba… y la expectativa de compartirlo todo con ella regocijó mi pecho… amarnos, cuidar de nuestra hija, correr por el bosque juntos, cazar… ella debía confiar en mí, debía hacerlo… yo jamás dejaría que algo le sucediese, si fuese necesario cazaría solo y le traería la sangre en bandeja de plata para que ella no tuviera que preocuparse por hacerlo, pero… cazar era una parte indispensable para un vampiro… y por más que yo así no lo quisiera, ella debía aprender a buscar su propio alimento y valerse por si misma. Ella era fuerte ahora, gloriosa en todo aspecto y debía demostrarle que eso era así, ella debía confiar en si misma como no lo había hecho cuando era humana… solo esperaba que mi deseo se viera reflejado de allí a toda la eternidad, mi único objetivo… hacerla feliz.

_¿Vamos?_ murmuré levantando la mano y tomando la suya que estaba sobre su cuello, repasé con mis dedos su garganta _no quiero que le hagas daño a nadie_ añadí en un murmullo sordo que sabía que escucharía.

_Estoy bien_ dijo sin faltar a su frase favorita _espera, primero hay algo…_ la vi vacilar ligeramente, mi padre reaccionó esta vez,

_¿Si?_ ella lo miró determinada

_Quiero verla… a Renesmee_ dijo pensando por un minuto para luego soltar mi mano y llevarla a su plano vientre, se aferró con su mano como garra a la delicada seda del vestido… anhelando… palpando… extrañando… sintiéndose vacía tal vez.

“No te atrevas a darle lo que ella quiere, como siempre… piensa en tu hija esta vez” el pensamiento de mi padre llegó hasta mí, por supuesto que estaba de acuerdo… no podía no estarlo, estábamos hablando de mi niña, de mi pequeña Renesmee que también la anhelaba escaleras abajo, si me hubiese pedido ver a Jacob primero, con gusto se lo hubiese llevado, pero ¿Renesmee? No…

Miré sigilosamente a mi padre dándole la razón pero ella se percató de nuestro cruce de miradas,

_¿Qué?_ exigió,

_Bella_ dije con voz tranquilizadora _esa no es buena idea. Ella es medio humana, amor. Su corazón late y corre sangre por sus venas. No querrás ponerla en peligro hasta que tengas controlada su sed ¿verdad?_ su rostro decayó ante mis palabras, podría decirse que era desilusión lo que mostraba o tal vez enojo…

_¿Dónde está?_ inquirió prestando atención a los sonidos de alrededor, sabía lo que su agudo oído de vampiro había captado… lo mismo que yo captaba a esa distancia a demás de los pensamientos… las respiraciones de mi niña y de Jacob atentos a lo que sucedía en la habitación, el corazón del chucho latiendo como un tambor, nada apetecible y un latido más rápido, húmedo, atractivo y ligero… el de mi niña que ahora reposaba en brazos de su protector,

_¿Está con Rosalie?_ preguntó

_Si_ mentí de manera cortante, Bella no tenía por qué saber aún sobre las pretensiones de su amigo, no hasta tener aplacada su sed, eso ahora mismo sería peligroso… para mi niña. Antes de que pudiera perder el control de la situación y delatar al maldito, tomé con mi mano la de ella que aún se situaba en su plano vientre y jalé

_Espera_ protestó nuevamente _¿Y qué pasa con Jacob? ¿Y con Charlie? Cuéntame todo lo que me he perdido ¿cuánto tiempo he estado… inconsciente?_ esas eran preguntas que aún no podíamos explicar, miré nuevamente a Carlisle preocupado,

_¿Qué está mal?_ preguntó mi esposa exigente,

_Nada está mal_ dijo Carlisle subrayando la última palabra _Nada ha cambiado mucho, en realidad… estuviste inconsciente sólo para poco más de dos días. Fue muy rápido, como esas cosas van. Edward hizo un excelente trabajo. Muy innovador… La inyección de veneno directamente a tu corazón fue su idea._ hizo una pausa para sonreírme con orgullo, luego suspiró _Jacob todavía está aquí, y Charlie sigue creyendo que estás enferma. Piensa que estás en Atlanta en este momento, en pruebas en el Centro de Control de enfermedades. Nosotros le dimos un mal número, y se ha frustrado. Él ha estado hablando con Esme_

_Debería llamarlo…_ dijo inconscientemente, luego de sopesar lo anterior me miró aturdida _espera… ¿Jacob está aquí?_

“Deja eso para después…” dijo mi padre en sus pensamientos…

_Bella_ dije rápidamente _Hay mucho para discutir, pero tenemos que cuidarte a ti primero. Debes estar sufriendo…_ ella me miró aturdida por un momento, tragó en seco posiblemente recordando la sed y volvió a preguntar por Jacob, me sorprendía su terquedad… en realidad no me sorprendía, muchas cosas seguían siendo como siempre…

_Tenemos todo el tiempo del mundo para las explicaciones, amor_ dije suavemente,

_Muy bien_ murmuró tragando incomoda,

_Espera, espera, espera…_ Alice brincaba dentro de la habitación con su típico aire soñador, la había olvidado

_¡Prometiste que podía estar allí la primera vez! ¿Qué pasa si ustedes dos pasan delante de algo reflectante?_ definitivamente había olvidado eso,

_Alice…_ murmuré en tono de advertencia,

_Solo me llevará un segundo!_ y con esa afirmación mi hermana salió disparada de la habitación

“Déjala que se vea, no seas egoísta y compártela…” rezaban los pensamientos de Alice, suspiré resignado… ya sabía yo que era imposible luchar contra la corriente y mi hermana era de esos ríos poderosos…

_¿De qué está hablando?_ preguntó mi dulce Bella confundida, pero en el momento en que le iba a responder, Alice ya estaba de vuelta acarreando con ella una espejo de la habitación de Rosalie, de Alice solo se veían los pies… porque todo lo demás era espejo. Mi hermana se adelantó hasta quedar un paso por delante de Bella, Jasper la seguía sigilosamente detrás con la mirada puesta en el rostro de mi esposa.

Bella se percató de la apariencia de mi hermano, aquella que solo reflejaban huellas de pasadas luchas con lo que mejor conocía del mundo vampírico… los neófitos, aquellas que con sus imperfectos ojos humanos jamás percibió y las que allí, convertida en uno de ellos podía ver fácilmente… cientos de cicatrices de las mordidas que ahora eran trofeos de guerra de mi hermano

“Está sobresaltada… creo que es bueno que sepa que puedo enfrentarme a un neófito teniendo la certeza de que voy a ganar” ese pensamiento de Jassper me perturbó un poco, antes de tocarla pasaría sobre mí… Mi esposa lo miraba con cautela y enseguida se tensó de manera defensiva, Jassper que la miraba intimidándola sonrió irónicamente

_Edward me reprochó el no haberte puesto delante de un espejo antes de la boda_ dijo Alice, distrayendo la atención de mi esposa de Jassper _y esta vez no me va a regañar_

_¿Regañar?_ murmuré recordando realmente muy bien las palabras, se las había dicho la noche de la boda en la fiesta, cuando me había tocado bailar con mi hermana y específicamente decían “Alice, por favor la próxima vez que utilices tu talento con Bella, ponle un espejo delante… es que ni ella misma tiene ni la mínima idea de cómo se ve ahora”

_Quizá estoy exagerando un poco_ murmuró con gesto ausente mientras volvía el espejo hacia Bella

_Yo diría más bien que esto tiene que ver con tu satisfacción personal_ dije conociéndola muy bien. Dirigí mi mirada a mi esposa en el mismo momento en que ella se inspeccionaba frente al espejo… ¿Cuántas veces la había visto? ¡Miles!... riendo de felicidad, sumida en una amarga tristeza, distraída mordiendo su lápiz en clases mientras se perdía en sus pensamientos, enojada por su propia torpeza, sonrojada ante su vergüenza… enamorada… apasionada… Ninguna de esas imágenes que aún yo retenía en mi mente le hacía justicia a la mujer que tenía parada frente a mí, sublime, gloriosa… terrible y poderosa, hermosa… y ella incrédula, parecía buscar en la mujer del espejo algún rastro de la Bella humana.

“Está ansiosa…” musitó la voz mental de Jassper.

_¿Y esos ojos?_ susurró _¿Cuánto tiempo estarán así?_ yo sabía que esa ínfima parte de su anatomía sería lo que no le iba a gustar para nada,

_Se oscurecerán en unos cuantos meses_ repuse con voz consoladora _la sangre animal diluye el color con más rapidez que con una dieta de sangre humana. Primero serán ambarinos y más tarde, dorados_ ella frunció su perfecta frente asombrada,

_¿Meses?_ el tono de su voz fue lo que alarmó a Jassper que dio un paso hacia delante,

“Se está alterando… su ansiedad repentina es alarmante” pensó Jassper aún analizando su estado de ánimo, Bella pareció percatarse de su reacción y nos miró a mí y a Alice, que se encontraba a mi lado sopesando distintos futuros… distintas consecuencias y premoniciones, en ninguna de ellas Bella mataba a nadie de la familia.

_No, me encuentro bien_ prometió ella, volvió a mirarse en el espejo y nos miró de nuevo _es solo que… cuesta mucho hacerse la idea_

“¿Me puedes decir cómo demonios lo hace?... ¿cómo es que está tan controlada?, esto… me sobrepasa” rezó Jassper ofuscado en sus pensamientos,

_No lo sé_ murmuré preguntándome lo mismo. Bella nos miró nuevamente con mala cara,

_¿Qué pregunta es la que me he perdido?_ sonreí ante su sagacidad, parecía que aún inmortal iba a seguir siendo igual de observadora,

_Jassper se pregunta cómo lo haces_ dije con calma

_¿Cómo hago qué?_ preguntó ansiosa

_Controlar tus emociones Bella_ respondió Jassper _Nunca he visto un recién nacido hacer esto, detener una emoción en seco de esa manera. Te molestaste, pero cuando viste nuestra preocupación, recuperaste el control sobre ti misma. Yo estaba dispuesto a ayudarte, pero tú no lo necesitaste_

_¿Y eso está mal?_ inquirió envarándose inmediatamente como si la fueran a juzgar

_No_ repuso Jassper algo inseguro. Bella no se sentía satisfecha con su respuesta por lo que acaricié con mi mano a lo largo de su brazo con intenciones de calmarla,

_Es admirable, Bella, pero no lo entendemos. No sabemos cuánto durará_ dije esperando que eso fuera suficiente para ella. Bella pareció reflexionar por un instante que a mí me pareció eterno,

_Pero… ¿qué es lo que piensas?_ murmuró Alice ya perdiendo la paciencia y señalando el espejo, bella volvió la mirada a su reflejo y sus ojos revolotearon mirándose de arriba abajo

_No estoy segura_ tratando de parecer más segura de lo que realmente estaba. Bella se quedó mirando en el espejo que reflejaba su belleza, sus ojos recorrían cada porción de su bien formado cuerpo, de cada una de sus facciones y de sus nuevos atributos… parecía increíble que aún no cayera en la cuenta de que esa hermosa mujer frente a ella era ella misma, hasta para mí era difícil de creer… Alzó una de sus manos para tocarse el rostro levemente, ¿Qué era lo que no podía creer? ¿Qué era aquello que la sumía en una aparente tranquilidad y que sin embargo la empujaba a la duda y la confusión?, me maldije al ver que su inseguridad aún seguía intacta en ella, me maldije por no poderle leer la mente y por haber creído que con su transformación esa condición no continuaría… y sin embargo estaba allí, frente a ella sin saber siquiera cómo actuar por miedo a herirla, defraudarla, enojarla… suspiré frustrado

_ ¿Decepcionado?_ preguntó mi esposa con una inquietante calma… ¿cómo podía ser capaz de creer eso?... reí de lo inverosímil de sus conclusiones, de lo absurdas de sus afirmaciones

_Si_ admití luego, Alice rugió ante mis palabras y Jassper, inclinándose hacia Bella, disparó contra mí una sarta de insultos que llegaron como dardos en mi mente. Yo continué impasible delante de mi esposa que me miraba con el dolor palpable en su rostro, rápidamente avancé un paso y la abracé envolviéndola entre mis brazos y la besé en la mejilla dulcemente, lo que menos quería era su expresión de dolor o tristeza así que me apresuré a aclarar todo de una vez

_Esperaba que sería capaz de leerte la mente, ahora que se parece más a la mía_ murmuré sobre su cabello _Y aquí estoy… frustrado como siempre, preguntándome qué será lo que anda fraguándose dentro de tu cabeza_ ella relajó su postura dejándose envolver por mis brazos fuertes

_Ah bueno_ repuso con ligereza _Supongo que mi cerebro nunca funcionará bien, pero al menos soy bonita_ … y ahí estaba… su sarcástico humor!

“Sii!!, lo sabía… sabía que terminaría por admitir que se ve bonita, eso es demasiado viniendo de ella… yo diría preciosa, gloriosa…” mi hermana continuó lanzando distintos calificativos que ni cerca se aplicaban a cómo se veía mi esposa realmente… no habían palabras en ningún idioma que lo expresase a la perfección.

_Bella, tú nunca has sido solo bonita_ gruñí en su oreja, si supiera lo que me provocaba esa exultante belleza,

“Edward… por favor, te lo pido por última vez…” la voz mental de Jassper llegó hasta mí,

_Bien, bien…_ repliqué cerrando fuertemente los ojos y haciendo un esfuerzo descomunal por contenerme, si seguíamos así el que iba a ser el sobrexcitado iba a ser yo

_¿Qué?_ preguntó curiosa ante mis palabras sin destinatario concreto

_Jassper se está poniendo más y más nervioso a cada minuto que pasa. No se relajará un poco hasta que hayamos ido de caza._ murmuré hastiado de las voces que gritaban en mi mente, ella observó la expresión preocupada de mi hermano y asintió.

_Bien, vámonos de caza_ dijo con cierta inseguridad, se soltó de mis brazos que envolvían su cintura de manera posesiva más que nada, tomó una de mis manos con la suya cubierta por un fino satín y le dimos la espalda a mi familia para tener nuestra primera experiencia juntos, la primera de muchas más que aún estaban por venir.

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Amigas! aquí estoy! Algo mejor, luchando con este maldito virus que ahora atacó a mi niña... uff bueno, les dejo este capi y espero que les haya gustado, lo hice con mucho amor hacia ustedes, que me acompañan todos los miercoles y el resto de los días... Manoli te quierooooo, ya sabes que no quiero que llegues a China, quedate junto ami, besotes a todas!! Nos vemos el viernes. Ah! ya vieron el día que publicaré el primer capi del nuevo fic?... vean la portada ja ja, gracias por todo su apoyo y palabras, por preocuparse y tenerme en cuenta... las quiero!

Merezco tus palabras??? Gracias!