Entre la sed y el deseo
Llevé a mi esposa hasta la cornisa de la ventana de la habitación, ella me miró incrédula mientras yo me devanaba los sesos por saber qué era lo que la hacía reaccionar así,
_¿La ventana?_ preguntó con una mueca de horror,
_Es la salida más conveniente. Si estás asustada, puedo cargarte._ le dije gustoso, no quería más que tocarla y cualquier excusa era buena,
_Tenemos toda la eternidad, y ¿estás preocupado por el tiempo que me tomará caminar por la puerta trasera?_ murmuró risueña… fruncí levemente el ceño,
_Abajo están Renesmee y Jacob_ murmuré recordándolos
_Oh…_ musitó comprendiendo,
_ ¿Renesmee se…encuentra bien…con Jacob ahí?_ la preocupación de mi esposa denotaba en la voz, Jacob estaba en la planta baja con mi niña en brazos y expectante a cada cosa que sucedía escaleras arriba _a él no le gusta mucho_
“Solo espero que este bien saciada cuando la traigas, no se acercará un centímetro de mi niña…” quise chocar los dientes con ese estúpido pensamiento de Jacob ¿cómo podía ser tan arrogante y pretender llamar “su” niña a MI niña.
_ Créeme, ella está perfectamente a salvo. Sé exactamente lo que Jacob está pensando_ murmuré con todas las ansias contenidas de salir de esa habitación y matar al maldito perro.
_Claro…_ musitó mirando el suelo una vez más, como si escuchara con su agudo oído los latidos de los corazones.
_¿Estás abrumada?_ pregunté ante el gesto de confusión de Bella,
_Un poco… no sé cómo.._ dijo para luego perder el hilo de sus pensamientos, aquellos que me maldije por no poder leer. Emmett se reía entre dientes sin entender, el muy idiota, el frágil temperamento de un vampiro neófito…
“No puedo creer que aún no se tenga confianza en si misma” rezaban los pensamientos de Jassper, en cierta forma era así, ya había demostrado tener más fuerza que todos nosotros juntos pero parecía que debíamos mostrarles sus ilimitaciones para que pueda creer en ella misma,
_Observa cómo lo hago_ dije retrocediendo un paso lejos de la ventana, saltar era como caminar para mí, no podía ser algo más fácil… para los vampiros no había nada que la destreza no se lo permitiera.
Salté con calma y me dejé caer hasta que mis pies tocaron el suelo con un sonido sordo, volví la cabeza hacia arriba esperando a mi esposa que había estado mirando desde la cornisa cada uno de mis movimientos, parecía dudosa… como si ese primer salto fuera a darle la certeza de que aún podía seguir siendo torpe. Estaba seguro que luego de su salto se sorprendería de su reciente adquirida firmeza y adquiriría esa seguridad que siempre la rehuyó.
Bella aún dudosa se fijó en los zapatos que venía trayendo, arrugó el entrecejo y miró de nuevo el suelo, yo estaba preparado debajo esperándola por si caía, aunque creía fervientemente en su destreza vampírica, ella dio un decidido paso al aire y cayó sin impulsarse, su vestido flameó en el aire antes de que sus finos pies tocaran el suelo con la punta de los pies, supuse que no quería arruinar los tacones de los zapatos… siempre considerada.
_Perfecto fácil_ dijo levantando su mirada y sonriéndome complacida, su movimiento retorció cada fibra de mi cuerpo llamándola, anhelándola…
_¿Bella?_ musité
_¿Si?_ dijo aún con ese brillo en la mirada
_Eso fue bien elegante, incluso para un vampiro_ dije ovacionando su salto… había sido mucho más para mí, pero se lo haría notar en privado, no con toda la familia a la expectativa. Ella sonrió para mí genuinamente,
_Gracias_ murmuró risueña, luego hizo algo que concordaba aún con la autentica Bella… se quitó los zapatos y los enganchó para luego tirarlos hacia la ventana abierta, Alice los tomó antes de que se dañara el revestimiento de la madera y se estropeara los tacones,
_Su sentido de la moda no ha mejorado nada como su equilibrio_ musitó mi hermana en tono de reproche.
Sin dejar de mirar a mi esposa la tomé de la mano y me lancé a correr con ella siguiéndome fácilmente, era tan fácil y dichoso todo ahora que ambos éramos iguales, que podíamos hacer lo mismo en similares condiciones, podía sentir como mi pecho se inflaba de felicidad y orgullo ante esa persona que como humana robó mi corazón, mis pensamientos y mi mundo y que ahora como inmortal sacudía todo de un modo que lo que sentía por ella resurgía con una fuerza arrebatadora y tempestuosa… la amaba, pero eso era aún decir poco, todo lo que sentía por ella sobrepasaba las palabras.
Corrí por la orilla del río, bordeándolo y dejando la casa atrás… llegamos juntos de la mano al lugar donde debíamos cruzar para alcanzar el bosque, mi nariz activa buscaba el efluvio de los lobos, sabía que por esta parte del bosque no estarían… no era su territorio, pero aún así debía ser precavido.
_¿Vamos a nadar?_ preguntó incrédula cuando nos detuvimos en el borde del agua
_ ¿Y arruinar tu lindo vestido? No. Vamos a saltar_ dije comiéndola con la mirada, ella analizó la distancia entro orilla y orilla
_Tú primero_ dijo como si eso fuera un tremendo reto, mi diosa aprendía de mí al mismo tiempo que yo estaba dispuesto a enseñarle todo… absolutamente todo. Acaricié su mejilla transmitiéndole la ternura que despertaba en mi su inocencia, di dos pasos hacia atrás y caminando rápidamente la misma distancia me impulsé sobre una piedra saliente que había en el lecho del río, mi salto calculado me llevó hasta la otra orilla con un poco más de velocidad de lo habitual que utilicé para dar una voltereta en el aire y caer entre los árboles,
_Fanfarrón_ escuché que decía mi esposa lo que me hizo reír, desde mi posición la podía ver entre las ramas de los abetos, se veía insegura y dudosa, pero luego observó el bosque y el río en su inmensidad y su rostro cambió a una expresión de suficiencia, con parsimonia dio un paso hacia delante y parte de su vestido se rompió sobre la costura del costado, ella observó lo que había hecho y sin ningún detenimiento tomó la tela entre sus manos doblándola y comenzó a rasgarla hasta la altura de su cadera baja… su pierna torneada fue acariciada por la tela mientras que sus manos hicieron el mismo procedimiento con el otro lado del vestido, reprimí un jadeo al ver semejante muestra de sensualidad… ¿cómo es que esa mujer que tenía en frente no se daba cuenta de lo que era capaz de causar en mí?
“Ese era un Gucci original… exclusivo!” gritaba la mente de Alice mientras apretaba los dientes, los demás reían ante la peripecia de mi esposa… hasta Jacob parecía verle la gracias, no pude despegar los ojos de mi bella esposa que ahora parecía concentrarse sumamente en algo con su ceño levemente fruncido,
_¿Bella?..._ musité acercándome unos pasos cerca de la orilla _¿quieres ver de nuevo?_ ella pareció pensarlo por medio segundo antes de suspirar profundo como dándose confianza y de un solo salto cruzó el río, tomó la velocidad adecuada pero no calculó la fuerza del impulso así que a medida que se iba acercando al bosque se iba alejando del lugar donde yo había caído antes, solo medio segundo después ella apareció entre los árboles tomando con su brazo una de las ramas aéreas de los Sitkas del lugar, se balanceó unas cuantas veces y se soltó para caer de puntillas, quince pies más abajo sobre una amplia rama. Me apresuré a ir corriendo a su encuentro gratamente sorprendido, ¿cómo había hecho para que ese fenomenal salto terminara con tal parsimonia? ¡Cómo podía amarla cada segundo un poco más?! Cómo si eso fuera aún posible…
Cuando llegué a su lado ella pisaba suavemente el suelo luego de dejarse caer desde la rama
_ ¿Estuvo bueno?_ preguntó excitada, la agitación de su pecho me decía que había sentido el sabor dulce de la adrenalina que, de alguna manera le había gustado descubrir lo que ella era capaz de hacer…
_Muy bueno_ dije sonriendo sin utilizar la palabra adecuada para lo que había acabado de hacer
_ ¿Podemos volverlo a hacer?_ musitó aún con excitación,
_Concéntrate Bella, estamos en una expedición de cacería_ dije recordándole el por qué estábamos aquí en realidad,
_Oh si… cacería_ dijo poniéndose seria de pronto, traté de calmar mi propia ansiedad al verla tan… no lo sé, ¿salvaje? ¿Natural? ¿Instintiva?... lo que ciertamente la hacía verse puramente sensual y desinhibida.
_Sígueme… si puedes_ dije orgulloso de mí mismo, nadie en mi familia era tan veloz como yo… a través de los años había llegado a perfeccionar esa característica primaria, haciéndome cada vez más y más veloz… ni siquiera Emmett con su rudeza y fuerza podía alcanzar la velocidad que yo adquiría en tan solo segundos.
Corrí sin alcanzar mi velocidad predilecta tan solo para esperarla a ella, mi esposa corrió a mi lado dispuesta a alcanzarme y dejé que lo hiciera… pronto, mientras corría comenzó a reír de manera histérica, la adrenalina pulsaba dentro de su cuerpo extasiándola y excitándola a más no poder. Era reconfortante para mi tenerla cerca, podía levantar mi mano y tocar su cabello que volaba libremente tras ella, sentía chocar contra mis fosas nasales el exquisito efluvio que despedía su cabello y la seda de su vestido, escuchaba atentamente cada sonido que se producía a nuestro alrededor con el paso de su cuerpo y el mío, el sonido de las aves revolotear por los aires sobresaltadas, los pequeños animalillos escabulléndose, cada hoja y cada afortunada rama que rozaban su piel desnuda de las piernas y brazos como si fueran suaves plumas, el perfume que levantaba desde la tierra húmeda con cada una de sus pisadas, el aliento rico que salía de su boca al emitir suaves y calmas exhalaciones. Toda ella me colmaba, cada parte de su ser, cada parte de su piel, cada nota de su voz podía volverme loco en segundos… ¿Qué digo segundos? En milésimas…
Bella seguía riendo a cada paso que daba, me di cuenta de que nos habíamos alejado ya bastante de mi área de caza habitual, pero ella seguía aún tan ensimismada persiguiendo un ciego objetivo que no se percató cuando decidí aminorar mis pasos y quedarme atrás, ella río por un momento y luego la llamé…
_Bella…_ llamé tranquilamente, ella se detuvo en seco, suspiró y dio media vuelta, tranquilamente habrían unas cien yardas que nos separaban pero ella con un solo salto acortó la distancia llegando en medio segundo a mi lado
_ ¿Querías quedarte en el país?_ pregunté divertido_ ¿O planeabas continuar hasta Canadá?_ su mirada se concentró en mis labios, Bella podía desconcentrarse fácilmente con tantas cosas nuevas…
_Está bien_ susurró aún mirando fijamente mis labios _ ¿qué estamos cazando?_
_Cierra tus ojos_ murmuré con el propósito de que logre concentrarse solo en el objetivo… su caza. Tomé suavemente sus mejillas con ambas manos, su respiración enseguida se aceleró con ese toque, pero lo que yo sentí fue una satisfacción enorme que se concentraba como una onda de calor que recorría mis manos hasta el centro de mi pecho… tocarla era mi única perdición, sin embargo me contuve y la guié en la práctica _escucha_ le indiqué _ ¿qué puedes oír?_
La dejé hacerlo… ella era capaz de oír lo mismo que yo oía, hasta el más pequeño e inaudible sonido del bosque que se cernía alrededor, el más mínimo crujir de las hojas, el caminar de las hormigas que subían por los troncos de los árboles cercanos, la suave brisa que mecía apaciblemente las hojas de las ramas altas, el sonido de los grillos a kilómetros de distancia y hasta el batir de alas de las aves que volaban a cientos de metros del suelo… pero había algo especifico que deseaba que oyera, ese latir pesado y apetitoso de los alces que en ese momento calmaban su sed en el arrollo cercano, ese torrente sanguíneo llamándonos a beber de él.
_¿Por el arrollo, al noroeste?_ musitó daleando la cabeza levemente como escuchando
_Si_ dije aprobando su acertada ubicación _Ahora…espera por la brisa de nuevo y… ¿qué hueles?_ pregunté ansioso, la sostenía con fuerza ya que temía su arrebato a tal grado que no pudiera satisfacer su sed, aunque era todo cuestión de seguir los instintos aún no sabía cómo reaccionaría ante la sed torturante y quemante de su garganta. Sabía que en primera instancia percibiría mi efluvio, pero dejando libre su olfato iba a poder ir más allá para percibir aquella dulce esencia que en ese momento comprimía mi garganta al haber pasado varias semanas sin sorber una sola gota de sangre, dolía y quemaba pero para ella sería peor y yo no sabía de qué manera su cuerpo reaccionaría.
Entonces respingó la nariz al captar el efluvio que emanaba su alimento, reí entre dientes ante esa mueca, mezcla de repugnancia y quemazón,
_Lo sé… cuesta acostumbrarse_ dije
_¿Tres?_ dijo adivinando según el pesado latir de corazones,
_Cinco. Hay dos más en los árboles atrás de ellos._ musité
_¿qué hago ahora?_ dijo esperando indicaciones, mis manos aflojaron su agarre en sus mejillas
_¿Qué tienes ganas de hacer?_ ella pareció pensar en la respuesta hasta que tragó en seco ante aquella sensación de resequedad en la garganta, entonces se envaró abriendo los ojos,
_No lo pienses, solo sigue tus instintos_ dije bajando los brazos y dando un paso hacia atrás. Bella se separó de mí y echó a correr llevada por sus instintos primarios, siguió el olor y dio con la fuente, la seguí detrás muy sigilosamente para observarla… en otras circunstancias no hubiera llegado tan lejos, esos alces eran animales grandes y pesados y podían aplastar a una persona, sin embrago en su nueva condición, la dejé ir. Ella se acuclilló detrás de un árbol preparada para dar el primer salto, con uno certero y preciso no tendría dificultad para llegar hasta ellos, pero teniendo en cuenta que Bella estaba aprendiendo, pude prever que haría saltos cortos hasta llegar hasta ellos.
Entonces en el preciso instante en que el viento se levantó sobre el prado cambiando levemente de dirección, una fragancia conocida tan atractivo como adictivo que no daba tregua a la sed, vino hasta nosotros. Me envaré pudiendo evitar ese olor pero al mismo instante en que ese efluvio llegaba hasta mí Bella ya lo había sentido. Corrí detrás de ella alarmado en cuanto comenzó a correr tomando otra dirección, no quería que lo hiciera, no deseaba eso para ella… sabía que estaba cegada por ese arrebatador olor, nuevo y delicioso, pero también sabía que si tomaba de aquella fuente, de aquel néctar… luego se arrepentiría y esa sería una culpa que pesaría sobre ella tanto como la sed. ¡Cómo no preví esa posibilidad?!... ¡¿Cómo no rastreé el perímetro de caza antes de llevarla?!... no pensé que habrían humanos cerca hasta que los olí, ya demasiado tarde.
Bella siguió corriendo arrastrada por ese aroma, la seguí de cerca… no la dejaría llegar, sabía que ella tenía mucha más fuerza que yo, pero al menos intentaría derribarla. Debía hacerlo, sería brusco y dolería hacerlo, pero ella comprendería cuando supiera luego las razones, si es que podía hacerla entrar en razón… imposible. De un momento a otro cuando estábamos a tan solo unos cuantos kilómetros de aquella fuente tentadora, Bella disminuyó su marcha casi deteniéndose, un gruñido se encerró en su pecho y dio media vuelta deteniéndose por completo, me detuve en seco en el momento en que ella se agazapó ante mí mostrándome sus dientes, el gruñido feroz escapó por sus boca… un gruñido de auto preservación, ella estaba defendiendo a su presa… de mí.
Alcé mis manos preparado para tratar de detenerla en el caso que se abalanzara sobre mí, prefería mil veces eso… prefería mil veces que me matara antes de que ensuciara sus manos con sangre humana, prefería estar muerto antes de ver su desdicha al darse cuenta luego de sus actos.
Esa no era mi Bella, no esa fiera enajenada cegada por la sed frente a mí, mi Bella pareció reaccionar en cuanto posó sus ojos en su perseguidor, en mí… enseguida pude ver como se incorporó horrorizada, luego de que la niebla que la cegaba había desaparecido como también el efluvio humano lo hizo, gracias al viento proveniente del norte. Ella se congeló en el lugar relajando su postura defensiva, entonces bajé los brazos,
_Tengo que irme de aquí_ susurró entre dientes usando el poco aire que contenía sus pulmones, luego de eso no respiró… ¿Cómo demonios sucedió eso?...
_¿Puedes irte?_ musité sorprendido ante su aparente autocontrol. Ella no contestó… en lugar de eso comenzó a correr por el camino por el que habíamos venido, hacia el norte…
¡Definitivamente ¿cómo había hecho eso?!... me paralicé por medio segundo conmocionado por lo que había presenciado, Jassper no me lo iba a creer… comencé a correr en cuanto me di cuenta que ella había pasado por mi lado. Corrí como un bólido siguiéndola, era difícil llevarle el paso… pero para mí, no era imposible. Justo cuando pude alcanzarla ella se detuvo en seco, sorprendido pasé por su lado impulsado por la inercia pero pronto me detuve y volví rápidamente a ella, puse mis manos en sus hombros y la miré fijamente a los ojos… ¡En ese momento era cuando más deseaba leer su mente!... deseaba jalarme los cabellos de mi cabeza al estar imposibilitado en ese aspecto ¿por qué…? ¿Por qué diablos no podía leer sus pensamientos justo ahora?!
_¿Cómo hiciste eso?_ inquirí, temía perder el control allí mismo y sacudirla de ser necesario para sonsacarle una palabra, pero yo no era así… yo no podría lastimarla aunque fuera imposible hacerlo de todos modos.
_Me dejaste ganarte hace un rato ¿no?_ murmuró ella ignorando mi pregunta, en el momento en que las palabras salieron de sus labios se percató de que podía respirar sin caer nuevamente en la tentación de nuevo ya que el aire estaba descontaminado de aquel efluvio, continuó respirando cuidadosamente… yo sacudí mi cabeza para no perder el hilo de mi pregunta, ella me confundía, me maniataba de todas las formas posibles haciéndome imposible poder seguirla… ella era mi perdición.
_Bella… ¿cómo lo hiciste?_ volví a preguntar ansioso
_¿Huir? Contuve el aire_ dijo como si fuera lo más obvio del mundo, no era ese el punto…
_Pero ¿cómo te contuviste a cazar?_ inquirí tratando de contenerme
_Oh… cuando viniste detrás de mí_ murmuró recordando _discúlpame por eso_ su voz era apenas un susurro.
_¿Por qué te disculpas? Yo fui el que estuvo espantosamente descuidado. Asumí que nadie estaría muy lejos de aquí, pero debí haber chequeado primero. ¡Un error tan estúpido! Tú no tienes nada de qué disculparte._ dije rápidamente, ella me miró con su rostro impasible hasta que comprendió
_Pero si te gruñí_ musitó sintiéndose horrorizada por tan esa acción,
_Claro que lo hiciste. Es algo natural. Pero no puedo entender cómo huiste._ murmuré dejándole en claro que entendía su manera de actual, lo que no me había quedado claro era su fortaleza para huir de lo prohibido, de lo endemoniadamente tentador, de rechazar su sed y optar por otra cosa.
_ ¿Qué más podía hacer?_ preguntó confundida _Quizá era algún conocido_ murmuró como si fuera lo más obvio del mundo y yo fuera un niño de tres años al que le explicaban que “eso no se hace”. No pude contenerme y rompí a reír como desquiciado… lo que ella veía lógico yo lo veía inverosímil, lo que ella encontraba obvio era lo que yo asumía como la peor prueba y ella había asumido esa prueba sin dificultad más que el hecho de haberme gruñido… que era lo que yo encontraba normal, pero que de algún modo era lo que ella encontraba el pecado más horrible del mundo! A parte del hecho de pensar que ese efluvio podía pertenecer a algún conocido… ¡lo que era, irracional!... es decir ¡¿desde cuándo un neófito se detiene a pensar de quien sería la sangre que lo llama y quema su garganta?!
_¿Por qué te ríes de mí?_ musitó la voz de Isabella, en ese momento me percaté de mi error… me estaba riendo a costa de un neófito, detuve mi risa y la miré cautelosamente.
_No me estoy riendo de ti, Bella. Me río porque estoy en shock. Y estoy así porque estoy completamente maravillado._ dije de la manera más clara posible.
_ ¿Por qué?_ inquirió expectante
_No deberías haber sido capaz de hacer algo como esto. No deberías haber sido tan… racional. No deberías haber sido capaz de estar discutiendo esto conmigo tan fresca y calmada. Y, más que cualquier otra cosa, no deberías haber sido capaz de detenerte a medio de una caza con el olor de un humano en el aire. Incluso los vampiros más maduros tienen dificultades con eso, siempre somos muy cuidadosos de donde cazamos para no ponernos tentaciones. Bella, tu comportamiento es como de un vampiro de décadas en vez de días_ murmuré admirando la mujer que tenía frente a mí, siempre dándome sorpresas, siempre haciéndome amarla más y más… hasta que llegaba a doler.
_Oh…_ jadeó pensando en lo que le dije, me sentía como un león enjaulado junto a ella y eso me ofuscaba de sobremanera. Suavemente puse mis manos en sus mejillas y miré a esos pozos que siempre habían sido sinceros conmigo, ahora podía ver el rubí en ellos, pero aún estaba mi Isabella en lo más profundo.
_¿Que no hubiera dado por ser capaz de ver en tu mente sólo por este momento?_ musité acariciando la suave piel satinada de su rostro, maravillándome con cada una de sus particularidades, mi Bella aún seguía siendo mi Bella y no podía ser más feliz por ello. Sus dedos hicieron lo propio con mi mejilla estremeciéndome como solo ella lograba hacerlo, derramando en mí esa carga magnética que se arremolinaba en el centro de mi estómago amenazando en estallar
_Pensé que no sentiría esto por un buen tiempo_ musitó viendo mis labios con… ¿anhelo? _Pero todavía te deseo_ vi la ansiedad en sus ojos, parpadeé aturdido ante esa confesión.
_ ¿Cómo puedes concentrarte es eso? ¿No estás desesperadamente sedienta?_ dije ignorando el hecho de que yo también la deseaba, tal vez más de lo que ella lo hacía conmigo… pero eso era algo que podía esperar, para mí lo más importante ahora era ayudarla a calmar la sed dolorosa de su garganta.
Entonces ella recordó esa sed… ¡Qué tan fácilmente la olvidaba!. Cerró sus ojos tragando en seco y luego suspirando. Sus sentidos comenzaron a viajar a través del bosque absorbiendo cada ínfima cosa en él, los sonidos, los olores, los movimientos y hasta el cambio que la tierra daba a cada segundo… Yo solo estaba frente a ella extasiado por tanta belleza frente a mí, su cabello sedoso y brillante que caía sobre sus hombros y por el que ansiaba por recorrer con mis dedos y perderme en su aroma, sus labios llenos a los que deseaba literalmente devorar, su piel perlada que ansiaba llenar de besos y caricias, su fino vestido que quedaría hecho jirones en cuanto mi irrefrenable deseo saliera a la luz y no pudiera ya contenerme.
Medio segundo más tarde Bella dio vuelta sobre sus talones y echó a correr hacia el este, mi nariz captó el efluvio de un animal que no tenía en mente como para que fuera su primera caza, quería algo menos “peligroso” como para empezar, pero prefería ese animal a un humano así que la dejé ir, la seguí detrás sigilosamente… Ella me guiaba en el bosque, sabía que sus instintos la guiaban a ella en esta excursión de caza, pero no podía evitar sentir recelo por este animal, no la dañaría en lo más mínimo pero ver a Bella en peligro iba contra de mis principios.
El efluvio se hacía más denso y apetecible con cada paso que nos acercábamos, conocía muy bien esa esencia… era después de todo mi pieza favorita para alimentarme, Bella siguió su rastro haciéndole caso a su nariz y oído surcando el bosque como una veloz flecha. De un momento a otro se escabulló entre las ramas altas de los abetos subiendo veloz por el tronco del árbol, no la seguí esta vez… podía tener una mejor vista desde el suelo, así que me limité a seguir sus movimientos desde tierra. Bella se agazapó sobre una de las gruesas ramas del árbol atenta a los movimientos del felino que sigilosamente cazaba sobre uno de los árboles cercanos, el puma era grande… podría decirse que el doble del tamaño de mi esposa y eso me alertó, corrí silenciosamente hasta quedar debajo del árbol en el que se agazapaba Bella para saltar hacia el animal si esta oponía mucha resistencia a la hora en que Bella lo cazara. Antes de lo que pudiera prever Bella ya había saltado sobre la rama del árbol donde el felino caminaba, éste al darse cuenta del movimiento de la madera volteó mostrando sus dientes con un gruñido feroz y salvaje desafiando a mi esposa, me envaré... el cabello de mi nuca se erizó en cuanto el puma la amenazó ferozmente, me agazapé decidido a derribarlo en cuanto tocara a mi esposa, pero ella hizo lo que jamás creí, con un salto certero y seguro e ignorando los dientes y las garras se abalanzó sobre el cuerpo del animal, cayendo ambos al suelo de la fronda.
No me acerqué a ellos, Bella podría reaccionar mal ante mi presencia… pero al verla luchar contra el animal de tal manera que las garras y los dientes de éste no provocaban nada en la piel de ella, verla buscar como loca la punzante vena del cuello del puma y sostener con sus brazos fuertes el cuerpo del animal sobre el suelo y finalmente verla hundir sus dientes en el cuello del felino bebiendo de él como si fuera el néctar más exquisito… fue lo que llenó mi pecho de sensaciones diferentes, ambivalentes entre sí. Por un lado tuve que sostenerme del árbol cercano para no saltar sobre ellos para ayudarla a detener los movimientos amenazantes del animal, la ansiedad que tenía al verla luchar contra un león era lo que me enloquecía y por otro lado cuando terminó de sorber esa sangre exquisita hasta su última gota tuve que abstenerme a no saltar sobre ella para… no hacerle el amor allí mismo, en medio del bosque. ¡Maldición! ¿Cómo podía verse tan endemoniadamente sensual cazando? ¿Cómo esperaba que yo no cometiese alguna estupidez gracias a mis bajos instintos?
Al terminar de beber del animal corrí hacia ella, Bella tiró el cuerpo del animal con asco como si beber de él no hubiese servido de mucho y trató inútilmente de arreglar su ropa, las zarpas del puma habían hecho jirones la vaporosa tela descubriendo su pálida piel, ya no había seda que cubriera sus piernas, ni torso… tragué en seco y me sentí como un vil fisgón cuando mis ojos recorrieron la extensión de sus piernas y la suave piel de su torso, sus pechos suaves y llenos y su plano vientre. Me recosté en el tronco del árbol para verla luchar contra su aspecto,
_Mmm…_ musité casualmente cuando sus dedos recorrieron el suave arco de sus senos, ella se percató de mi presencia
_Creo que pude haberlo hecho mejor_ dijo acomodando su cabello,
_Lo hiciste perfectamente bien_ aseguré _Es sólo que… fue mucho más dificultoso ver para mí de lo que había pensado_ ella levantó sus cejas confundida.
_Va contra mis principios, dejarte luchar contra leones. Tuve un ataque de ansiedad todo el tiempo_ expliqué, ella sonrió
_Tonto…_ murmuró meneando la cabeza
_Lo sé, los viejos hábitos nunca mueren. Aunque, me gustan los arreglos de tu vestido_ murmuré sin poder evitar recorrer su cuerpo desnudo con mi mirada, ella pareció cohibirse pero en seguida sacó otro tema a colación,
_¿Por qué todavía estoy sedienta?_ se quejó
_Porque eres joven_
_Y supongo que no hay otro león cerca ¿no?_ dijo alzando las cejas, ni aunque lo hubiera la dejaría nuevamente acercarse a él, no por ahora…
_Pero hay muchos ciervos_ dije mostrándole la otra alternativa, ella hizo una mueca desagradable
_No huelen tan bien_
_Herbívoros. Los carnívoros huelen casi como los humanos_ le indiqué, ella quedó pensativa por un segundo,
_No tanto como los humanos_
_Podemos regresar_ dije sabiendo que ella no accedería, tan solo tanteando el terreno
_Quienquiera que estuviera ahí, si eran hombres, probablemente no les importaría morir si tú fueras el que los entretiene_ murmuré devorando su cuerpo con los ojos _De hecho, pensarían que estaría listos para morir e ir al cielo en el momento que te vieran_ de pronto pensé en la cantidad de hombre que tendría que ahuyentar durante toda nuestra existencia.
_Vamos a cazar algún apestoso herbívoro._ murmuró rodando los ojos.
Corrimos a través del bosque hasta que encontramos una manada de alces que huía de nosotros aterrorizada, cacé dos saciando la sed atormentante de semanas mientras Bella lo hacía a mi lado, hubiese deseado la sangre apetitosa de un puma pero eso significaba exponer a Bella nuevamente a pelear contra un puma, a demás esta vez se trataba de mi Bella y yo solo me conformaba con unos cuantos alces. Antes de terminar con la caza llené mi cuerpo con la sangre de un tercer alce mientras veía con mi vista periférica a Bella hacer lo mismo, de un momento a otro ella se detuvo y quedó observándome cazar, me cerní sobre el cuerpo del animal y bebí hasta la última gota… no era suficiente, nunca lo era, pero servía al menos para calmar la sed. Di vuelta en seguida mi cabeza para verla a ella parada aún observándome, su rostro estaba surcado por una mueca de un sentimiento extraño, como si fuera orgullo y ¿deseo?...
_¿Ya no tienes sed?_
_Me distrajiste. Eres mucho mejor que yo_ musitó encogiendo los hombros,
_Siglos de práctica_ dije restándole importancia,
_Solo uno_ corrigió, solo pude reír
_¿Terminaste por ahora? ¿O quieres continuar?_ le pregunté ansioso, sabía que iba siendo hora de que viera a su hija y su sed debía estar lo más apaciguada posible,
_Ya terminé creo_ dijo dudando, pareció pensar un segundo en algo. Me escocían las ganas de poder ver más allá de sus ojos, su mente tal vez… pero su calma me dijo que estaba considerando su estado para poder continuar con lo que si o si tenía que hacer,
_Quiero ver a Renesmee_ dijo luego de un momento. Claro… era lo más difícil tanto para ella como para mí, ver a nuestra hija… ver a su hija era lo que ocupaba su mente ahora que se sed estaba atenuada, podía ver su indecisión e inseguridad surcando sus ojos por lo que alcé mi mano para que viniera a mí… la tomó y se acercó lentamente, sus dedos acariciaron mi piel una vez más, como si le gustara lo que tocaba. Enseguida alzó sus brazos y de puntillas de pie los enredó en mi cuello, sus ojos fijos en los míos me gritaban que me necesitaba de igual manera que yo la necesitaba a ella… era una fuerza avasalladora que no podíamos ignorar. Rodeé su cintura con mis brazos y la atraje hacia mí, me incliné hacia ella sin preámbulos ni vacilaciones y toqué sus labios con los míos, era algo que había esperado por casi un siglo entero… tocar los labios de mi amada sin prejuicios ni cuidado, con toda el ansia contenida, con todo el deseo que mi cuerpo encerraba, besarla hasta perder la razón era algo que cómodamente podía hacer.
No había otro lugar en el mundo en el que quisiera estar, solo allí, junto a ella con mis brazos a su alrededor, sintiéndola… saboreándola, haciéndonos uno con nuestros labios ansiosos, con nuestras lenguas anhelantes y demandantes, besándola con premura con deseos tantos, sin inhibiciones… solo allí. Solo con ella… sin ella nunca más… con todo el amor que con su beso me colmaba, con infinita entrega que casi podía sentir lo que ella sentía, casi podía fundirme en ella como si fuéramos una sola persona…
Me contuve agónicamente de hacer lo que ella estaba haciendo, aunque no sabía hasta dónde iba a poder hacerlo, hasta dónde llegaba mi voluntad… su mano acarició mi nuca enredando sus dedos en mi cabello y su otra mano libre recorría mi pecho haciéndome estremecer de placer, eso encendió aún más esa llama creciente en mi interior desplazando todo resquicio de cordura, de voluntad… la deseaba tanto que dolía, tanto que parecía arder mi piel con el suave roce de sus dedos, la besé con premura, fervientemente mostrándole mi deseo mientras en mi interior la bola de fuego iba creciendo, no iba a aguantar abalanzarme sobre ella y hacerle el amor como realmente quería hacérselo, no iba a soportar…
Entonces mis piernas flaquearon y caí sobre la fronda con ella encima,
_Oops_ dijo, y reí debajo de ella _No fue mi intensión irme encima de esa manera. ¿Estás bien?_ acaricié su rostro anhelándola más que nunca…
_Mucho más que bien_ dije quedándome corto, ella sonrió pero yo debía recordarle lo que teníamos pendiente… que tal vez fuera mucho más fuerte que su deseo por mí, nuestra pequeña… _ ¿Renesmee?_ pregunté… Ella pareció indecisa con su elección… si satisfacer ese deseo abrumador por mí o conocer finalmente a su niña, yo sabía que teníamos días y largas noches por delante para satisfacer nuestro deseo, para doblegarnos ante esa irrefrenable pulsión… pero en ese momento debíamos asumir que lo más importante era nuestra hija… asumir que la teníamos, demostrarle que en verdad había sucedido, que nuestro amor había dado el más hermoso de los frutos.
_Renesmee_ asintió, se puso de pie jalándome con ella. El deseo podía esperar y mientras más se alargara la espera más delicioso sería el manjar. Corrimos de vuelta a casa tomados de la mano como de allí en más haríamos… para siempre.
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Amigas! uff... nuevo capi, espero que les haya gustado... dios! cómo se aman estos dos!... Bueno, este capitulo va con todo mi amor para mi querida Kokoro Black que está pasando por un difícil momento, te quiero mucho amiga, fuerza y recuerda siempre que la vida nos golpea solo para hacernos más fuertes. gracias por estar siempre allí, besotes y disfruten!
Merezco tus palabras?? Gracias!
31 comentarios:
wow OMG!!! adoro tus historias t felicito eres muy buena!!!
.........salu2 desd COSTA RICA!!
felicitaciones mil para tan excelente escritora amo tus historias continua asi
hola!!
me encanto este capi :)
muchisimas gracias por subirlo y por estar al pendiente de las historias
eres muy talentosa lo supe desde que lei el primer capi
besos
UF UF QUIERO UN EDWARD,, TE FELICITO, CADA VEZ LO HACES MEJOR
MARITZA
Super este cap, en amanecer Bella casi llega a la cima con solo ver a Eddie, pero el no se quedo atras me encanto este cap, y me uno a tu dedicacion para Koko animo nena y para delante pa tras ni pa tomar impulso.
Besotes desde COlombia! ♥
Lullaby!!! Me encanta el capítulo... pero sabe a poco. El que se queden a medias no hace a nosotras quedarnos con la miel en los labios. jus! Menos mal que sabemos que queda poquito para que vean su casa nueva y demás... ^^ jeje
Espero con ansias el siguiente capítulo. Tengo curiosidad por ver cómo narras el encuentro de Bella y su niña.
Muchos besos! =)
Laurita!
Lu el capítulo estuvo extraordinario, eres una excelente escritora. Me encantan todos tus fic, tienes un talento facinante. Espero con ansias el próximo capí, además del fic de Cuidanto tu vida que me encanta mucho también.
Te envío un abrazo!!! Gracias por regalarnos tus magníficas historias!!!
Y yo, que por muchas veces que haya leído Amanecer no me enteraba porque se detuvo Bella mientras estaba cazando: sí, ya sé que olió un humano, pero que pensó en ese momento, hasta hoy (es que cuando quiero soy muy torpona, que le voy a hacer)
Besotes, que estoy deseandito seguir leyendo
Ains te podría haber firmado la primera muchas veces pero mi computer parece estar programado a una hora que vaya lento y a otra que vaya rápido jajaja
Este capi ha estado super bien, me he entretenido bastante leyéndolo joder que si vicia!!! mmm!!! ahora creo que irá o ya falta poco para que Bella ataque a Jacob o mejor dicho lo intenta porque Seth se pone siempre por el medio pobrecico que tirón de brazo llevará jeje
Oye, una pequeña duda del fic Custodio mío... ¿En ese fic son humanos o alguno será vampiro?
Venga cuídate mucho hermosa que gracias a ti me levanto la moral cuando la tengo tirada por los suelos, muakss!!! besicos!
Te felicito. Es una delicia leerte. Estoy releyendo "Amanecer" junto con tu fic, y lo estoy flipando, disfrutándolo el doble, ¡qué digo el doble! el triple como mínimo. Muchas gracias niñas, sigue así!
Besos!
(L)
Ahhhhhhh!!
me encantoo!!!
leeria mil veces
este capi!!
xd!!!
de verdad.. admirob tu forma
de escribir cada sentimiento
y pensamiento!! que me da envidiaaa!
xd!!
Saluditos Lu!!
Fran!
“Solo espero que este bien saciada cuando la traigas, no se acercará un centímetro de mi niña…” quise chocar los dientes con ese estúpido pensamiento de Jacob ¿cómo podía ser tan arrogante y pretender llamar “su” niña a MI niña.
Ese era un Gucci original… exclusivo!” gritaba la mente de Alice mientras apretaba los dientes,
Me encantan los pensamientos que nos revelas y que Stehp solamente nos dejo intuir.
Y esa hermosa descripcion de cuando dos dos corren por el bosque... (Suspiro).
Eres realmente maravillosa!!!!
Carmen M.:
Que otra cosa se podria esperar de ti Lullaby que no sea toda una obra de arte, uff que capitulo, aun estoy hiperventilando jaja, hay Lullaby, amo esta historia hay y todo lo que nos haces sentir al darle vida a Edward de esta manera no lo puedes ni imaginar Lu, besos para ti, aplausos, ovaciones, todo niña, esperando con ansia el proximo capitulo
me encanto lullaby!!! soy dayanna de venezuela ;)
Genial el capi, lo hiciste perfecto. sigue escribiendo siempre, ya no podemos vivir sin nuestra droga
AMAKARA
Lullaby como siempre impactante, los sentimientos de Edward tan bellos , uien no se va enamorar de ese vampiro jiji.
Besos Lady
Eres increible,cuando lei amanecer pense que jamas podria leer algo mejor,me equivoque este capitulo supera al verdadero capitulo de amanecer,tiene muchisima fuerza y sentimiento,un abrazo. Te dejo mi blog me encantaria q pasaras a leerme escribo una historia despues de amanecer.htpp://prendidodetusalas.blogspot.com
OH POR DIOS!!!! ESTUVO GENIAL, NO HAY PALABRAS Y RECIÉN ESTAN COMENZANDO SU NUEVA Y ETERNA VIDA!!!!!!!! EL CAPI TE QUEDÓ PERFECTO, TE ADMIRO REALMENTE, SEGUÍ ASÍ SIEMPRE!!!!!!!!!!!!MUCHOS BESOS
hay hay sisisisi me encangtoooooo luuuu
Y.lo.hiciste.de.nuevo.Lullaby.te.
quedo.excelente.el.capi.
Saludos
AlePattz
Ya se que publicas muy rapido y siempre cumples, pero es tan dificil dejar de leer, es tan dificil tener tu talento en mis manos por fasciculos.
Eres extrordinaria Lullaby, te mando un beso fuertisimo en agradecimiento por tus horas de trabajo.
Sigue asi, querida lo haces genial.
Irenecomendador / Esperadoanochecer
precioso, como siempre!! jaja!! me encanta!
Lullaby:
Estas llevando muy bien la historia, nos tienes atrapadas esperando el miercoles, muy completa ya que en la historia original quedan algunas dudas.
Gracias.
Carmen Molina.
lullaby me encanto el capitulo y me imagino q cuando vea edward a sus dos amores juntos va a ser fantastico. muchos besos
Woow.. Maravilloso capítulo Lullaby!!
Soy lectora frecuente de tus fics desde hace algunos meses, pero esta es la primera vez que comento, por tiempo más que nada porque siempre tenía las ganas :).. y es para decirte que simplemente.. ESCRIBES MARAVILLOSO!! Ya leí completo Ángel de medianoche y tooodos los capítulos que haz publicado de Cuando tu corazón deje de latir, cuidando de tu vida y Amor Prohibido.. Siempre entro a tu blog viendo si haz actualizado y siempre me llevo gratas sorpresas ..
Tienes un inmenso talento ! Soy adicta a tus fics jejeje
Simplemente.. Espectacular :)
Saludos y Besos desde Chilee !
Pía.
Me encanta este libro. Pero odio no podia leerlo mas seguido. Solo espero q see cargador llegue pronto. Y q tu hija se mejore
me encantan tus historias!!!! estoy enganchada!!! lo haces muy bien. espero que tu hija se mejore.gracias por escribir tan amenudo... en otros blogs no son tan considerados... muchas gracias por todo. un beso y un abrazo desde España!!!
Te vuelves a lucir lullaby!
me encantan tus delirios!
y si, esos dos se amaman hasta ya no poder mas.....
Saludos desde Guatemala
(otra vez :) )
afff q lindooo "nuestro amor había dado el más hermoso de los frutos"
Te quedo super lindo este capitulo y Edward tan tierno, lindo , romantico...... quiero uno como el aunque lastima nunca habra uno igual............
Gracias Lu por tan bonita historia
Saludos y besitos.
Ufff! Me encanta cuando se los vé tan deseosos el uno del otro!!
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