El cisne es un ave fiel, que ama y muere por amor. El cuervo es cruel y habita en la oscuridad... ¿qué tan imposible es que un ave tan noble se enamore de una tan oscura? Bella Swan espera encontrar la respuesta... Edward Masen espera por ella.
IMAGINARIO
Original de Lullaby
Sentí el sabor metálico en la boca, mi lengua áspera parecía cubierta de arena… mierda, necesitaba agua urgente. Abrí mis parpados solo para sentirlos pesados y cerrarlos de nuevo, la luz del sol me daba en la cara…
_Maldición…_ gemí volteando sobre mi estomago y hundiendo mi cara en la almohada. Mi estómago sonó y se apretó reclamando por un poco de comida, tendría que ver qué había hecho Tanya… si tenía suerte.
Sentí una punzada en el labio cuando me relamí los labios resecos, entonces vino a mi mente lo que había sucedido la noche anterior… o parte de eso. Solo los golpes fueron lo más doloroso, luego de eso… fue como haber estado en una nube gloriosa o en algún lugar que había sido transportado y del que me hubiese gustado no salir jamás.
El color que veía en mi mente y tranquilizaba el dolor de mi cuerpo era el marrón, un color cálido y suave. Me gustaba pensar en el marrón por alguna extraña razón. Era como también evocar un aroma… extraño, especial, floral y suave… ¿qué mierda…?
Lejos estaba de oler a flores en mi habitación, levanté la cabeza y me sorprendí cuando vi en mitad de la almohada donde tenía apoyada mi cabeza, un pañuelo blanco… con flores… ¿he?
_Tanya!..._ grité tomando ese pañuelo en mi puño, me senté en la cama y cerré los ojos cuando un mareo me aturdió.
Alguien abrió la puerta dejando entrar el olor a algo como huevos fritos y aceite rancio, arrugué la nariz y traté de ignorar las nauseas, levanté la vista y Tanya estaba apoyada en el marco de la puerta de brazos cruzados y vistiendo solo una remera que reconocí como mía,
_¿Qué mierda Tanya?_ gruñí levantando el pañuelo en mi mano _te dije que no quiero tus porquerías en mi habitación, mucho menos en mi cama_
Ella rodó los ojos y los centró en el trapo que tenía en mi mano, en un segundo frunció el seño…
_Esa cosa no es mía… ni siquiera me gustan las flores_ bufó acercándose a mi lado, tomó el pañuelo de mi mano y lo examinó antes de olerlo _cursi… ¿quién le pone perfume a sus pañuelos?... ¿B.S?... ¿quién es? Y es asqueroso, tiene sangre._
Fruncí el seño con esa información… ¿B.S?, sangre… entonces, como un golpe de viento vinieron a mi memoria varias imágenes borrosas por el alcohol y lo demás. Ondas y ondas de cabello marrón que caían a los lados de un pálido rostro, un par de ojos oscuros que me veían con desconfianza y lástima, unas manos finas y delicadas que limpiaban mis heridas con este… con este mismo pañuelo.
Bella…
_Bella!_ murmuré al instante en que los recuerdos me llenaron la mente. Alcé la vista y miré a Tan _ es… Bella_
_¿Qué carajos?... ¿acaso hablas italiano ahora?_ rió ella sin comprender. Volví a mirar el pañuelo y lo llevé a la nariz, aspiré en él como solía hacer con otras sustancias y el olor a ella me envolvió otra vez…
Oh cielos…
Rodé los ojos en blanco y me dejé caer de espalda contra la cama… ¿Quién mierda era esa mujer y por qué aún tenía su pañuelo? Dejé mi mano empuñando el trozo de tela, puesta sobre mi nariz absorbiendo eso tan particular aunque temía que de tanto olerlo se terminara el perfume.
Traté de poner mis recuerdos en claro y comencé a esforzar mi mente a través de la noche anterior. Mike… Mike Newton y sus amigos, Taylor, Sam y otros borrachos más, sabía que les debía dinero! Mierda!... pero ¿qué derecho les daba eso de golpearme en un callejón como si fuera un perro… aunque a los perros se los trataba mejor.
Recordé cada golpe, cada patada en mis costillas, cada puñetazo en mi rostro…
_¿Quién mierda te crees Masen ¡No arriesgo mi culo solo para que tu lo disfrutes y luego no me des lo que vale!... Esto es una jodida advertencia idiota!... si no la tomas en cuenta pronto, vamos a arrastrar tu culo podrido aquí y juro que no será solo unas jodidas patadas!_
Y luego vino todo lo demás…
Los ojos marrones, el cabello sedoso y embriagado de este olor, manos pálidas… labios carnosos y rosados, su aliento cálido sobre los míos. ¿qué mierda?
Llevé mis dedos a mis labios como si hubiese sentido un cosquilleo, solo un leve cosquilleo. Y como un remolino de imágenes vino la última que retuve en mi memoria, sus labios sobre los míos.
_Hey Eddy…_ oí la voz de Tanya antes de que sintiera su cuerpo sobre el mío, sus piernas a cada lado de mi cadera y sus manos corriendo por mi vientre debajo de mi remera manchada de sangre, su aliento en mis labios… aliento con aroma a rancio y alcohol. _¿quieres pasar el rato?... tengo una línea, vamos cariño… Jassper se fue a buscar unas cuerdas para su guitarra_ su cadera se movió contra la mía y las tomé con ambas manos para detenerla.
_No estoy de ánimo hoy…_ dije antes voltear mi rostro a un lado, necesitaba esa sensación de esos labios rosados y regordetes en los míos… no la impronta de otra mujer. Era lo único más puro que me había pasado últimamente y no estaba dispuesto a renunciar a eso tan pronto.
_Vamos bebé…_ sentí los labios de Tanya en la piel de mi cuello y cerré los ojos… si esos labios fueran esos que ahora tenía en mi cabeza y que sabía que iba a ser difícil de sacar…
_Tan, sal de mi cama_
_Oh vamos, nunca antes te quejaste_ dijo chupando el lóbulo de mi oreja. _estoy tan caliente Edward, en esta posición te ves tan… hombre_ sentí su mano presionando mi entrepierna que seguía tan dormida como yo.
_Tanya sal de mí, mierda!_ empujé sus caderas a un lado y me levanté de la cama. Guardé el pañuelo en mis vaqueros y fui hasta mi placar para tomar una remera limpia… o poco usada que tenía el logo de The Ramones y la cambié por la que tenía, que era un asco. Salí de mi habitación sin mirar atrás y caminé hasta la cocina, por supuesto Tanya había dejado el “almuerzo” sobre un plato tapado con otro, tomé una lata de cerveza del frigo y caminé con el plato hasta la mesa…
_Mierda de vida… cada día huevos fritos y arroz._ refunfuñé.
Aunque si no fuera por Tanya, Jassper y yo estaríamos seguramente ahogándonos en nuestro propio charco de mierda. Ella era mi prima en realidad, amiga nuestra desde donde recuerdo y por más que quisiera no podía estar enojado con ella… después de todo, había soportado mi egoísmo masculino por años. Olvidábamos que éramos primos cuando la necesidad apremiaba y rechazarla hería su ego en lo más profundo… mierda. Supongo que ahora me tocaría comer pan y agua hasta que se le pasara el enojo.
Terminé de comer y caminé hasta la sala provista solo de un par de sofás sucios, unos pufs que necesitaba urgente aguja e hilo y una alfombra raída y quemada por la ceniza de cigarrillo que caía en ella. Tomé mi guitarra que estaba en una esquina y me dejé caer sobre el sofá hundido.
Tenía unos acordes en mente y tenía que encontrar la manera de que salieran, tensé las cuerdas de mi guitarra y comencé a tocar… no necesitaba conectarla al amplificador, Tanya me mataría y los vecinos también, a demás… no estábamos en ensayo, solo era yo y mi guitarra.
Los ojos marrones vinieron a mi mente y cerré los ojos, mis dedos sintieron las cuerdas y tocaron… solo por tocar. Entonces recordé su voz… era suave y armoniosa, era dulce y pura… ¿cómo mierda había ido a parar algo tan hermoso y puro en medio de un callejón oscuro?. Su cuerpo vino a mi mente cuando ella trató de ayudarme a sostenerme en mis talones, su cintura estrecha y pequeña, sus piernas largas y envueltas exquisitamente en un par de vaqueros, sus pies en esos tacones rojos que… oh cielos…¿Qué hubiese sucedido si Mike se encontraba con ella antes que conmigo… ¡Mierda!
Conocía la manera de moverse de Mike con las mujeres, el hijo de puta no les daba opción, las trataba como mierda y hacía que ellas hicieran lo que él obligaba. Lo había hecho hasta con Tania por mercancía, lo haría con cualquiera…
Hasta con ese ángel…
Mis dedos cayeron con brusquedad sobre las cuerdas haciendo resonar las notas discordes y desafinadas en el aire. Mi respiración se aceleró con tan solo pensar en lo que él haría si se encontrara con ella… con ese ángel. La tomaría, la obligaría a hacer sus inmundas peticiones y la rompería para siempre, un hermoso ángel puro… no podía pasarle eso.
¿Qué sucedería si ella volvía a ese callejón y en lugar de toparse conmigo se topaba con él?... ¿Qué sucedería si ella deseaba saber cómo me encontraba y solo me buscaba allí? no, no, no… mierda! No podía dejar que eso sucediera.
Dejé caer la cabeza sobre el sofá y gruñí de impotencia…
Vamos Masen… sabes que las posibilidades de que alguien como ella vuelva a ese lugar solo para verte es una en un millón. Además… ¿Qué podía hacer yo más que rogar que eso no sucediera?...
Tanya apareció por la sala y se dejó caer sobre el sofá frente a mí, sus mejillas enrojecidas me dieron un indicio de lo que había estado haciendo en mi ausencia… no, no quería saber. Continué tocando las cuerdas de mi guitarra ahora jugando con las notas de “Fly with the black swan ” y tratando de verla a ella un poco más en mi memoria.
_Si no estabas de humor no era necesario tratarme así_ … Tanya interrumpió mi intento de recordar. Alcé la vista y ella me miraba con una ceja alzada, su cabello rubio estaba recogido en una cola alta y sus ojos azules penetrantes me miraban expectantes,
_Solo me tiene preocupado la presencia de… Mike anoche_ mentí. Al tipo lo tenía calado, no me amedrentaba tan fácilmente y podía con él… pero un pensamiento de él con ella… mi ángel, en alguna situación en la que ella no saldría muy favorecida. Me retorcía las entrañas.
_Eso lo hablamos con Jas, dice que conseguirá el dinero… pero que más te vale no meterte en más problemas y mucho menos en negocios con él_
En ese momento abrieron la puerta del departamento y Jassper cruzó el umbral con un par de bolsas. Su mirada de reproche me dijo que había escuchado lo que Tanya había dicho.
_¿Entendiste verdad?... basta de hacer negocios con la mierda esa, no pienso ir a buscarte al hospital la próxima vez o a la cárcel, mucho menos a reconocer tu cuerpo en un cuarto forense._
Sus palabras eran claras y por lo general funcionaban, después de todo era mi hermano y quería mi bien… o al menos mi talento para la banda. De todas maneras, rodé los ojos y seguí tocando.
Por la tarde ensayamos un poco, Jassper era el bajista de la banda, a demás de negociar las presentaciones, que no eran tantas ni tan buenas… algunos clubes de mala muerte de la ciudad y algún que otro bar. Tanya se encargaba del coro y los teclados, teníamos a Emmett que era el baterista… cuando no andaba ocupando con las grupies que solo veían su cara bonita y finalmente yo era el guitarrista y la voz principal.
Solo éramos un grupo de garaje, mediocre y sin otro objetivo que tocar buena música y tratar de compartirla con quien le gustara o estuviera lo suficientemente borracho o pegado como para oírnos. No ganábamos mucho, a penas para mantener los instrumentos y comer… pero era lo de menos, Tanya era la dueña del departamento, por lo que era otra de las cosas por la cual formaba parte de la banda.
“The ravens” era nuestro nombre y generalmente apuntábamos a la música estilo heavy y pesada, con una mezcla agradable de melódico, aunque esa pizca era impuesta por mí cuando los chicos me lo permitían. Era el encargado de componer la letra y Jasper me ayudaba con la música por lo que ellos tenían que atenuarse a lo que mi mente me dictaba. Aunque tenía que admitir que muchas veces solo tocábamos covers de otras bandas, como The Ramones, Stratovarius, Sonata Arctica y the Smashing punkis.
_Mierda!... perdón… lo sé, tengo que atender_ murmuró Tanya cuando interrumpimos el ensayo gracias al sonido de su celular. Gruñí por lo bajo y saqué la tira de mi guitarra del pecho para ponerla sobre el sofá… necesitaba una cerveza.
Jassper negó cuando volví de la cocina con dos latas de cerveza, Tanya tomaría la que sobraba por lo que la dejé sobre su teclado.
_Así que… ¿quién era la chica anoréxica que Tanya vio contigo ayer en el callejón?_ preguntó mi hermano riendo. Lo miré aturdido…
_No era anoréxica… era delgada, una figura… increíble, pero no lo que tú crees o lo que Tan vió…_ mierda!... mi hermano siempre se las arreglaba para hacerme hablar de más.
_Bueno, según ella… esta chica era fea, demasiado delgada y parecía una nerd_ él continuaba riendo y juro por todos los cielos que me dieron ganas de darle un puñetazo en sus perfectos dientes.
_Esa chica estuvo allí para ayudarme_ dije dejando de lado lo que seguramente la envidia de Tanya le había hecho decir. _Y por supuesto… sabes que cuando se refiere a una chica cerca de mí no debes creerle a Tanya_
_Lo sé hermano… ¿cómo se llamaba?_ preguntó él sacando el último cigarrillo de un paquete.
_Bella…_ murmuré sin darme cuenta. Bebí un trago amargo de mi cerveza y en ese momento quise algo más fuerte para apagar la sensación de su nombre en mis labios.
_Oh claro… ayer te tiré en tu cama mientras repetía una y otra vez… “Oh Bella.. mi dulce ángel”_ el idiota lazó una carcajada cuando le tiré el envoltorio vacío de cigarrillos.
_Perdón… sigamos, era Kate, quiere saber si tocaremos en su club mañana en la noche, hay un maratón de bandas locales_ murmuró Tanya viniendo desde la cocina.
Miré a Jassper y él se alzó de hombros, asentí y con eso estábamos ya de acuerdo en tocar en el club de borrachos de Kate. Miré a Tanya que veía su teléfono con el seño fruncido…
_Tu amiguita tendría que tener más cuidado..._ dijo mirándome con burla _le deja usar su teléfono a cualquier desconocido para hacer llamas… sin tener su opción de “Identidad desconocida” activada…_ volteó su celular y sonrió con burla.
Luego de un segundo un nuevo recuerdo cayó en mi memoria, Bella dándome su celular, yo hablando con Tanya… su protector de pantallas, un par de zapatillas de bailarina como única imagen.
Me alcé de hombros como si no me importaba, pero el mismísimo cielo sabía que haría cualquier cosa para conseguir ese número de celular… incluso darle a Tanya lo que quisiera de mí, aunque eso significara perder la sensación de los labios de mi ángel en los míos.
Y cuando Tanya se durmiera tuviera mi posibilidad de conseguir ese número… porque de repente deseaba con locura volver a oír esa voz.
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Bueno… the raven quedó maravillado con su ángel… veamos qué sucede en el próximo capi… ¿Edward logrará lo que quiere?
5 comentarios:
No me había dado cuenta que este capitulo estaba publicado. No me aparecio en mis favoritos, y paseando por tu blog me encontré esta actulizacion. Estoy contenta de que se haya actualizado!
Vaya, empece a leer esta historia ayer, y me aprecio genial, no habia visto que estaba aqui en el blog, espero que se pueda actuaizar pronto, un Edward un poco desaliñado, pero suena bien. Anie
Esta fic es hermoso, le veo mucho potencial, bueno todas tus fics son perfectos. espero que puedas seguir con el porque me habia enganchado. Gracias por todas tus fics lullaby. :)
Mmm... Pues así de necesitado por verla otra vez creo que ese Cuervo lo lograra, seguramente se la encontrara en la tocada del bar.
Cuando empece a leer la parte donde dice que Edward y Tanya son primos... Wakala! Me dio asco solo de pensarlo.
Besitos!
naa sos una geniia!!!me encantaron tus historias y yo leo todo lo que me caiga en las manos asi que me voy a entretener un rato con tus blogs:)
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