Capitulo 20: Solamente tú

Tweet

Solamente tú

_Jacob está aquí_ anunció Ángela. Asentí desviando mis ojos de mi blackberry por un segundo y luego volvieron a caer de nuevo en esas palabras que Edward me había escrito…

Suspiré profundo y guardé mi celular en mi bolsillo trasero levantándome del sofá. Al mismo tiempo Jake entraba por la puerta de la sala.

_Hey!_ saludé acercándome a él, abracé su torso fuerte y al separarnos le di mi sonrisa cordial, la mejor que podía mantener, porque definitivamente no estaba de humor esta noche. _Me alegra que estés aquí_

_Bella, yo estoy feliz de estar aquí, gracias por esto_

_No me des las gracias a mi Jake, es mi trabajo… nuestro trabajo_ alcé mis hombros _ espero que esta noche compense lo que sucedió ayer…_ miré las puntas de mis pies avergonzada _tú te mereces algo mejor que ser el hombro en que las mujeres lloren_

_Tú me necesitabas, siempre fuimos amigos sobre todas las cosas, estoy orgulloso de haber estado allí para ti_

Asentí con una sonrisa y lo abracé nuevamente, él siempre sería mi amigo por sobre todas las cosas, eso era una verdad irrefutable.

_Cuídala, es uno de mis tesoros Jake…_

_Lo sé…_

_Usa condón_ le advertí señalándolo con mi dedo índice. Él rodó los ojos.

_Qué desconfiada eres, si… lo usaré_

Asentí satisfecha y volteé a Ángela que esperaba al pie de las escaleras,

_Áng, dile a Leah que Jake está esperándola_

Ángela asintió con una sonrisa y comenzó a subir las escaleras hacia las habitaciones. Caminé hacia los sofás de nuevo y le indiqué con la mano a Jake que se sentara,

_¿Cómo estas hoy?_ preguntó él con genuina preocupación en el rostro. Alcé los hombros y traté de sonreír.

_Bien, estoy… bien_ bajé mi mirada a mis dedos entrelazados en mi regazo.

_Vamos Bella, te conozco… fuimos los mejores amigos, fuimos novios y se qué estas escondiendo todo. Anoche… estabas tan rota que por un segundo estuve dispuesto a tomar el teléfono celular y hablar con este Cullen.

Alcé la mirada rápidamente… él no mentía.

_Nunca te vi tan destrozada, ni siquiera cuando le dispararon a Charlie_

Dios…

Sentí que mis ojos se llenaban y pestañé rápidamente para tratar de alejar el escozor.

_Hay cosas, que nosotras no nos podemos permitir…_ comencé, pero Jake me interrumpió con un “Bah!”

_No me vengas con que no te puedes enamorar ni con ninguna estupidez de esas, cuento viejo Bella… eres una mujer adulta y libre, ¿cómo mierda esperas ser feliz entonces?_

_Supongo que no estoy destinada para eso_ murmuré en voz baja mirando nuevamente mis dedos.

_Eso es mentira y lo sabes_ dijo él colocando sus codos en sus rodillas para poder alcanzar mi mano con la suya _ realmente… te lo mereces Bella, por todo lo que sucedió. Te mereces ser feliz con quién tú quieras. Yo sé que mi momento ya pasó, no soy estúpido… y no hay nada que pueda hacer, porque ya tienes entregado el corazón, pero puedo hacer algo Bella… me lo debes_

Lo miré asombrada… ¿Qué iba a hacer mi ex novio y prometido? Chantajearme? Manipularme de alguna forma?. No, el Jake que yo conocía no era así, tampoco el nuevo Jake.

_¿Qué?_ pregunté con cautela,

_Hacerte prometer que pase lo que pase, trataras de ser feliz_

Sentí mis ojos llenándose y sonreí suavemente, él solo tenía buenos deseos para mí. Lo comprobé la noche anterior en el hotel y lo escuchaba nuevamente ahora.

Sonreí al recordar mi frustrante noche de desahogo junto a Jake. Él había sido un perfecto caballero a pesar de que yo me había impuesto en mi papel de zorra. Al llegar a nuestra habitación solo me dispuse a caminar directo al minibar y tomar una botella de Green grose, hacer un aperitivo con un poco de juego de arándano y tomármelo casi en unos pocos segundos. Me preparé un nuevo trago mientras me mordía el labio tratando de encontrar la respuesta de porqué estaba allí a punto de competer una estupidez.

_Bonita… ven, vamos a la cama_ susurró Jake detrás de mí envolviendo mi cintura con sus manos grandes y fuertes. Cerré los ojos y tomé varias respiraciones profundas tratando de sacar ese rostro que tanto me había roto esa tarde.

Edward…

Di vuelta en mis talones con los ojos cerrados y traté de mantener mi respiración calmada, levanté mis manos y luego de ponerlos en cada lado del rostro de Jake, lo atraje hasta mí. Lo besé… suave al principio, reconociendo esos labios que no tenían lo que yo necesitaba, lo que yo mas deseaba…

Sin embargo continué besándolo, ciega, con la terrible necesidad de sacar todo rastro del hombre que tenía mi vida dada vuelta de mi mente.

Oh dios… ¿cómo sacarte si te marcaste en mi piel?

Un sollozo se escapó de mis labios, el alcohol en lugar de calmar mis penas las hacía mas evidentes, pero Jake no se separó de mí. Me llevó hasta la cama.

_Hazme sentir…_ supliqué sobre sus labios _hazme olvidar_ mi voz era apenas audible para mi, mis ruegos y suplicas solo escuchadas por mí.

Jake me llevó lentamente hasta la cama, mientras mis manos fueron directamente a su pantalón, tratando de desabrochar su cinturón y luego su bragueta. A él no le importó. Llegamos a la cama y lo empujé por el pecho para que quedara acostado sobre el colchón, me cerní a horcajadas sobre él, sintiendo su dureza entre mis piernas… ninguna satisfacción inicial me trajo eso, solo dolor por lo que iba a hacer.

Las lágrimas comenzaron a caer mas intensamente por mis mejillas, saqué su camisa de la prisión de sus pantalones y tomé la orilla de mi vestido para sacármelo por la cabeza. Jake hizo una ingesta de aire y me sostuvo de mi cintura con ambas manos mirándome a los ojos.

_Estas llorando_ dijo abriendo bien los ojos.

_No…_ gemí limpiando mis lágrimas con cierta desesperación. _estoy bien. Quiero esto, quiero que marques mi cuerpo, no pertenezco a nadie Jake…_ me castigué mentalmente por decir esas palabras, mi cuerpo tenía dueño con nombre y apellido _ por esta noche quiero volver a pertenecer a ti_

_Bella_

_Por favor Jake_ gemí retorciéndome miserablemente encima de su erección. Él gimió cerrando los ojos. Subí mis manos por su abdomen escultural arrastrando la camisa en el camino, un par de gotas cayeron sobre su piel morena.

_Bella_ él tomó mis muñecas fuertemente y detuvo mis movimientos _Bella…_ susurró en derrota.

_Por favor Jake_ sollocé _ necesito… esto_

_No_ sus ojos brillantes parecían cansados y un largo suspiro salió de entre sus labios _no así Bella._

_¿A caso no me deseas?_ gemí dejando de retorcerme. Había buscado el deseo, pero no había encontrado… no con Jake.

_Dios y el cielo entero sabe que te deseo Bella, pero no así._ con un movimiento estuve recostada en la cama a  su lado, él tomó el cobertor y tapó mi cuerpo desnudo y tembloroso, las lágrimas no cesaban de correr por mis mejillas _no cuando tienes en mente a otro hombre, no cuando solo quieres olvidarlo, no cuando ya no eres mi Bella mas_

_Lo… siento tanto_ gemí tapando mi rostro con las manos sin dejar de sollozar..

Dios, me sentía tan miserable. Tan poca mujer. El hombre que deseaba no merecía mi vida, se merecía cosas mucho mejores que una prostituta… y el hombre que tenía a mi lado… se merecía la felicidad y no mi intento estúpido de tapar un clavo con otro.

_Shh… _ susurró Jake acariciando como plumas, el lado de mi brazo. Mi pecho dolía, dolía tanto que parecía que me estaba vaciando por dentro y cada gota de vida se drenaba con cada bombeo de mi corazón.

No supe cuanto tiempo estuve allí con mis manos tapando mi rostro avergonzado y mi cuerpo sacudiéndose de dolor. Solo sabía que Jake estaba aún presente a mi lado porque sentía sus dedos como fantasma por mi piel.

Finalmente mi llanto se detuvo, solo me estremecía cuando una nueva ola de dolor cruzaba mi cuerpo, los dedos de Jacob limpiaban mis mejillas mojadas y traté a duras penas de restablecer mi respiración.

_Lo siento_ dije con voz ronca. Volteé mi cabeza hacia un lado sin abrir los ojos, no iba a poder soportar la mirada de lástima y tal vez asco de mi ex prometido.

_Si estas enamorada de él… ¿por qué no quieres estar a su lado?._ dijo secando mis lágrimas. _el tipo se veía… desesperado_

_Está confundido_ dije con voz quebrada.

_Está enamorado, conozco ese sentimiento Bella._

_Arruinaría su vida, si se supiera de mí, lo que soy, su reputación iría en caída. No quiero eso, él… está luchando por ser socio de su compañía, no podrá serlo si su jefe se entera que fue todo un engaño_

_Eso es una mierda… si él te ama, si él tiene huevos, aclarará la situación…_

_Jake… es muy difícil la situación_ dije acomodándome de lado, acurrucándome en el pecho de Jake, como en los viejos tiempos.

_Veremos qué tan difícil es, mañana será otro día… mañana puedes pensar mejor las cosas_

_Gracias Jake_ susurré cayendo en la somnolencia. _sigues siendo un buen amigo_

Él rió. _Siempre para ti Bella_ besó mi templo _duerme cariño, mañana te regresaré a tu casa sana y salva._

_Mhmmm_

Fin del flashback

_Hey Jake!..._ la voz de Rosalie me sacó de mi línea de pensamiento _ llegaste temprano! Leah estaba ansiosa por salir contigo_ murmuró trayendo del brazo a Royce, un cliente asiduo de ella. Tendría que ver mi oficina mas tarde para ver mis sofás en qué estado habían quedado, aunque confiaba en mi amiga, ella sabía que la regla de “No sexo en casa” era importante para mí.

_Bella, nos vamos, Royce ya firmó el contrato y acaba de pagar mis servicios. El cheque está sobre tu escritorio_ asentí ante sus palabras. _nos vemos más tarde… Bella, Jake_

Suspiré guiñándole un ojo a mi amiga, pidiéndole indirectamente que se cuidara… sabía lo fuerte que este hombre había caído en ella.

Cuando ellos abrieron la puerta me estaba levantando del sofá para ir a ver a Leah a ver si necesitaba ayuda con algo, pero ella ya venía bajando las escaleras. Miré a Jake que la miraba algo… perdido y obnubilado y se paró para recibirla a los pies de la escalera, siempre un caballero.

Entonces cuando me iba a retirar a mi oficina para terminar el contrato de Rose y disponer del cheque de Royce, sentí un grito ahogado desde la puerta y un golpe fuerte fuera de la casa, Rose chilló y corrí hasta la puerta para ver lo que había sucedido. Vivíamos en un vecindario seguro, pero nunca faltaban los tipos obsesionados que entraban a la casa sin permiso, hoy no iba a ser una excepción, a pesar de que había mandado a poner un portero eléctrico.

Corrí detrás de Rose y Royce hacia la entrada y me detuve en seco cuando mis ojos se posaron en la escena que tenía delante de mí.

OH POR DIOS…

OH MIERDA

Edward…

Y Emmett?...

_¿Quién anda ahí?!_ gritó Royce cuando nos acercamos lo suficiente.

Estaban ambos enredados en el suelo delante de mí, Emmett con una mueca de dolor pero mirando fijamente a… Rose. Edward sin una pizca de vergüenza, levantó la mirada para cumplir con la mía, una de las esquinas de sus labios tiró hacia arriba,

_Hola Bella…_

Dios, dios, dios…

Traté de encontrar mi voz, pero estaba encerrada en mi garganta y mis sentidos difuminados en la entrada de la casa, mi cordura… en algún lugar recóndito de mi cerebro.

Sentí la mano de Jake en mi baja espalda, en un gesto de protección o de posesividad, no lo sé. Pero vi los ojos de Edward dirigirse hacia ese lugar y su verde intenso se oscureció y su mirada se tornó triste.

_¿Llamo a la policía Rose?_ preguntó Royce con voz amenazadora.

_No…_ dijo mi amiga con voz temblorosa. Fruncí el seño y  despegué mis ojos de Edward para mirarla, ella parecía… asustada, afligida, alarmada.

_Rose_ pensé que Royce había hablado, pero me di cuenta que era Emmett que se había levantado del suelo, limpiándose las manos en sus pantalones.

¿Se conocían?

No pude dilucidar nada porque en un instante alguien había tomado mis mejillas entre sus manos y mis ojos se fijaron en un par de ojos verdes, profundos, brillantes y urgentes.

_Bella… por favor, tengo que hablar contigo_ Edward estaba frente a mí y yo no podía emitir palabra. _por favor, no me niegues hablar contigo, por favor Bella…_

_Bella_ la voz de Jacob hizo fruncir el seño a Edward y supe con seguridad que estaba conteniéndose a sobrrereaccionar, apretó los dientes y me miró fieramente pero con súplica.

_Jake… no, ve a buscar a Leah, no la hagas esperar… estaré bien_ dije sin dejar de mirar a Edward.

_¿Estás segura?_ preguntó él detrás de mí, la preocupación genuina en su voz.

_Estoy segura, solo… necesitamos hablar_

Vi el evidente alivio en las facciones de Edward y decidí que no lo empujaría de mi vida, que sería sincera y que le haría ver las cosas, por más que él no quisiera.

Toqué sus manos que me sostenían y enredé mis dedos con los suyos, bajé su manos y no nos separamos, miré a Rose y fruncí el seño cuando estaba aún mirando a Emmett como si hubiese visto un fantasma.

Tomé una respiración profunda y caminé hacia atrás con Edward tomado de mis manos, Jake estaba junto a Leah en la entrada y les sonreí segura cuando pasé a su lado, dios… se veían tan bien juntos.

Solté una de mis manos para voltear de espaldas a Edward y caminé hacia mi oficina. Una vez adentro cerré la puerta con el pestillo y solté a Edward para caminar hasta la ventana, necesitaba respirar… necesitaba pensar. Acaricié la palma de mi mano donde aún persistía esa magnífica electricidad que Edward dejaba en mi piel cada vez que la tocaba.

Una respiración profunda…

Dos reparaciones profundas…

Tres respiraciones profundas después…

Sentí los cabellos de mi nuca erizarse por su cercanía. Cerré los ojos.

_Solo… quería verte una última vez, solo… quería saber si valía la pena luchar_

Por dios… su voz sonaba tan rota. Quise llorar…

_Sé que sientes esto Bella, la electricidad, la pasión, la lujuria… se que sientes el deseo… pero… no sé si sientes…_ se detuvo y lo oí respirar profundo antes de ahogar un gemido en su garganta.  _el amor…_

Oh dios…

_Quisiera que tomaras un puñado de mi corazón y lo pusieras en tu pecho, para que sientas lo que yo siento. Es tanto y tan abrumador, que me estoy cayendo a pedazos… tan intenso_

Me mordí el labio para intentar contener mis lágrimas, pero sabía que era solo cuestión de tiempo para que mi pecho deje de funcionar. Si hablaba… yo me rompería.

_Sé que piensas que no te mereces ser amada, lo tengo claro… pero Bella, ¿no merezco ser amado tampoco?._

Si bebé… si y mucho, pero no por alguien como yo.

_Te necesito… tanto que duele Bella_  susurró a pocos centímetros de mí _tanto… que solo imaginarte y verte con alguien más, me rompe el pecho Bella_

Oh dios… él cree que estuve con Jacob!? Mierda… por supuesto que cree que estuve con Jacob.

_Te amo y si tú me lo permitieses, quisiera darte todo. Absolutamente todo amor… mi mundo entero, mi amor, mi adoración…_ sentía su voz cada vez más cerca, mis rodillas se doblarían en cualquier momento. _Eres mi luz Bella, ¿no te das cuenta?... no pretendas alejarme de esa luz, porque quedaría en total oscuridad. Eres tú, solo tú…_

Haces que mi cielo

vuelva a tener ese azul,

pintas de colores

mis mañanas solo tú

navego entre las olas de tu voz

y tú, y tú, y tú, y solamente tú

haces que mi alma se despierte con tu luz

tú, y tú, y tú..

_Si me permites la posibilidad… te haré la mujer más feliz de esta condenada tierra amor… sólo… déjame estar aquí, junto a ti y sostener tu mano…_

Oh cielos… no podía mas…

Enseña tus heridas y así la curará

que sepa el mundo entero

que tu voz guarda un secreto

no menciones tu nombre que en el firmamento

se mueren de celos

tus ojos son destellos

tu garganta es un misterio

_¿Qué dices cariño?... ¿puedo ser tpuyo otra vez? ¿puedes dejarte amar por mí?_

Mierda… mierda! Edward Cullen y sus malditas palabras. Tenía que hacer un último intento… él sí que luchaba y sentía todos mis muros derrumbarse.

_Dame algo bebé, porque me estoy hundiendo aquí_ dijo con agonía.

Mis ojos se llenaron de más lágrimas y respiré hondo. Él necesitaba algo… y se lo iba a dar.

_¿Tu trabajo? ¿tu puesto como socio mayoritario? ¿tu familia? ¿tu reputación? ¿el respeto?_ susurré en voz baja, tan rota… negué con la cabeza _ no puedo dejar que pierdas todo eso por mí, estas… poniendo mucho en juego y no lo ves_

_No, no lo veo_ dijo con ferocidad, cerré los ojos tragando un sollozo _ no lo veo, porque nada de eso es como lo piensas. No es así._ sentí sus dedos fantasmas por el costado de mi cuerpo, siguiendo el contorno de mis caderas _ eres una dama Isabella, más dama y más mujer que muchas que conozco y que  llevan el título por debajo de las sombras. Eres esto y lo hiciste por algo noble, salvar a tu hermano… eso siempre será digno de respeto y buena reputación, para mí. Lo hiciste por amor bebé…_

_Edward…_ jadeé soltando un sollozo incontenible.

_Déjame darte la felicidad que te mereces amor, quiero todo contigo. Quiero que el mundo te conozca como la mujer que capturó mi corazón, quiero que cada hombre en esta puta tierra te vea de mi brazo_

Siempre tan sutil con su complejo de posesividad. No pude evitar soltar una risita.

_Por favor… no sé qué hacer sin ti, no sé qué rumbo agarrar… porque por cada lugar que miro, me faltas tú para caminar. Dios Bella… te amo tan jodidamente mucho, sé… que estoy suplicando aquí, mendigando, pero eso es solo un poco de lo mucho que soy capaz de hacer por ti_

_Dios Edward…_ sollocé. Repasando en mi mente el porqué tenía que estar lejos de él… ya no podía dilucidar con claridad el motivo.

Sus brazos entonces se cerraron en mi cintura, apretándome contra él, fuerte… como si fuera un madero en mitad del tormentoso mar. Y me rompí…

_Dios… te amo tanto_ gemí apretando mis brazos con los suyos para que no me suelte jamás.

_Oh… mierda!_ gimió ocultando su rostro en mi cuello. _dilo otra vez, dilo bebé… hazme feliz otra vez… hazlo cariño, dios… necesito oírlo_

La desesperación en su voz…

_Te amo_ grazné _te amo tanto Edward… te amo, te amo_

Entonces en un microsegundo casi imperceptible en el tiempo, él tomó mis brazos y me volteó hacia él, su boca buscando la mía sin vacilar, con firmeza y fuerza. Sus manos tomando cada lado de mis mejillas y hundiendo su lengua en mi garganta como si no obtuviera suficiente. Sus gemidos resonaban en mi boca junto a los míos. Reaccioné y subí mis manos para enredarse en su cabello, tirando de él más cerca de mí.

Dios… quería de él todo… quería a mi Edward, porque era imposible arrancarlo de mi cuerpo, de mi corazón. Qué tonta había ido…

_Repítelo_ gimió en mi boca. Pude sentir su dureza en mi estómago y no me ayudé a mí misma. Gemí retorciéndome. _Di que me quieres… dilo_

_Te quiero Edward Cullen, te quiero en mi vida… dios… te amo_ gemí tomando su rostro entre mis manos, quería que me mirara, quería que viera la sinceridad en mis ojos… _Perdóname, perdóname mi amor…_

_No me vuelvas a apartar…_ pidió con una súplica.

_Nunca… estás en mi vida… y ahí te quedas_ ambos sonreímos. Y fue así como Edward Cullen volvió a mí… para quedarse.

______________________________

AAuuuuu... al fin!!!. Amores para el próximo capitulo habrá un Emmett POV... espero que les haya gustado y en serio, mil perdones por la espera, este capi se hizo en serio rogar. Besotes y nos vemos en la próxima!! ¿No es cierto que la canción está hermosa???