Capitulo 20: Dolorosa espera

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Amigas!!! aquí con este esperado capi, me han llegado mail que me han preguntado y suplicado cuando publicaba este fic, eso me llenó de felicidad... saber que hay quienes lo leen aunque no dejen sus comentarios es muy satisfactorio para mí. Aunque me gustaria demasiado que dejen sus palabras, este es el dic que más me cuesta, no solo por lo largo que es sino por lo complejo del personaje, Edward... mi esposo... es muy complicado, profundo y sensible así que tengo que hacer mi mayor esfuerzo por meterme en su piel. Besotes a todas y gracias por siempre estar, las amo... y por fa!!! COMENTEN!!!

Capitulo 20: Dolorosa espera

Sin perder ningún momento di vuelta sobre mis talones y corrí tan rápido como pude de nuevo hacia mi casa, el chasquido había sido muy fuerte y acompañado del jadeo de dolor de Bella me pareció que se trataba de algo muy grave… mi esposa estaba sufriendo y era a causa de esa criatura que tenía en su interior.

No pude pensar en nada cuando la vi, la visión se me nubló y casi caigo de rodillas sin fuera que debía llegar a su lado y hacer algo, solo sostenerla, acariciar su espalda…. ¡Algo!... ¡Maldición! Para algo más que andar lamentándome y quemándome a carne viva por allí debía servir. Ella me necesitaba…

El escenario con el que me encontré fue escalofriante, mi esposa, el amor de mi existencia estaba acostada en el sofá con su cuerpo retorcido del dolor hecho un ovillo, sosteniéndose el prominente estómago… Carlisle a su alrededor trataba de saber qué era lo había sucedido y Rosalie trataba de averiguar el estado de esa cosa tanteando con su mano el vientre de bella. Yo llevé mis manos nerviosas a mi cabello tomándolo y jalándolo con insistencia, nada podía hacer más que mirar, más que verla sufrir de dolor.

_Dame un segundo Carlisle_ murmuró suavemente mi esposa, aún aferrándose a su estomago prominente

_Bella, he oído que algo se rompía…_ insistió mi padre desesperado _tengo que determinar qué fue_ dijo señalando su costado con cuidado, ella debía comprender que eso podía ser grave _Tengo que hacerte una radiografía. Quizás allá astillas. No queremos que perfore nada._

Mi esposa pareció meditarlo por unos segundos y asintió, Rosalie se preparó para ayudarla a incorporarse…

_Yo lo haré Rose…_ protesté, ella me mostró los dientes y en un gruñido me indicó que ella ya la tenía. No tuve fuerzas para protestar, debía dejarlo ser, así que solo me limité a seguirlos subiendo la escalera detrás de ellos al cuarto que habíamos preparado para estas situaciones. Rosalie suavemente la recostó sobre la camilla de rayos x, el rostro de mi esposa por un momento se crispó por el dolor y yo me acerqué a ella para al menos sostenerle la mano, era lo más cerca que mi hermana me permitía estar.

Carlisle rápidamente preparó todos los artefactos para revisar a Bella, ella miraba todo con algo de recelo al igual que Rosalie, acaricié su mano infringiéndole ánimos y confianza, ella no podía pensar aún que pretendíamos hacerle algo a la criatura… ¿a caso no iba a entender que era ella la prioridad?, ¿qué solo a ella obedecía y que no haría nada que la hiciera daño de cualquier manera?... Sus grandes ojos marrones revolotearon hacia mí cuando percibió mi caricia, le sonreí lo más dignamente que podía, con todo el valor y la entereza que me permitía mi roto cuerpo, mi quemado corazón… ella me respondió de igual manera. Era obvio que ninguno de los dos quería ver el dolor en los ojos del otro, yo no quería que ella viera mi sufrimiento y ella no quería que yo viera el suyo. Éramos dos seres destinados a ser uno, nos necesitábamos para sobrevivir, para subsistir.

Me perdí en sus ojos hasta que Carlisle anunció que se trataba de una costilla rota, trague en seco sabiendo lo doloroso que debía ser eso… mi Bella era valiente al no demostrar más de la cuenta su profundo dolor.

_Se está fortaleciendo, al mismo tiempo que tú lo haces_ explicó mi padre _ su crecimiento esta propasando los límites de tu cuerpo Bella, es fuerte y eso se puede suponer por la manera en que se mueve… una patada más y puede llegar a romperte la cadera hija_ la mirada de mi padre era de aflicción, Bella parecía calmada al igual que Rosalie, pero Esme y yo no soportábamos escuchar eso. Miré a mi padre con gesto desesperado buscando una respuesta, una pista de lo que debíamos hacer… me vi reflejado en sus ojos y casi no me reconocí, era un muerto en vida, un hombre en la hoguera…

“la va a destruir hijo, será inevitable y rápido por la manera en la que el feto está creciendo, ella no lo soportará”

Estábamos perdiéndola lenta y tortuosamente y nadie podía hacer nada más que esperar… debía comenzar a idear un plan ¡maldición!, un plan para mantenerla viva.

Rosalie me permitió levantar a Bella de la camilla y regresar con ella al salón, mi esposa recostó su cabeza en mi pecho mientras íbamos bajando, traté lo más posible de sincronizar mis pasos y de ser suave al caminar, ella debía sufrir el menor impacto posible, parecía que hasta con el menos movimiento en falso Bella se podía romper, la veía tan delicada, tan frágil… sin embargo tan llena de valor y valentía, tan llena de lo que a mí me faltaba.

Al llegar a la sala me percaté de la presencia del gran lobo Alpha, lo vi recostado en la entrada, cerca de la puerta y en el suelo… dormía apaciblemente a pesar de hacerlo sobre el suelo duro y frío. Bella, que dormitaba en mis brazos, no se había dado cuenta de la presencia de su mejor amigo. La dejé con sumo cuidado sobre las almohadas del sofá y acomodé sus pies de manera que descansaran sobre un almohadón alto, Rosalie se apresuró a taparla con las cobijas.

“Pobre muchacho, está demasiado cansado”, los pensamientos de Esme llegaron hasta mí y la vi retornar escaleras arriba rápidamente hacia una de las habitaciones. Me senté en el brazo del sofá donde descansaba mi esposa y me detuve a observarla, respiraba dificultosamente y un pequeño gemido, casi inaudible escapaba de sus labios… eso me preocupó, la costilla rota debía de estar haciéndole daño,

_Debe tratar de no moverse para que la lesión no empeore_ dijo mi padre al descubrirme mirándola con el seño fruncido _debemos confiar en que sanará si Bella hace el esfuerzo de no moverse y si mantenemos alimentado al feto para que no se desquite demasiado con su madre_ asentí débilmente sin separar la mirada de mi esposa, la veía tan inocente y tan ajena a todo… tan Bella. Sonreí mientras le acariciaba los cabellos añorando épocas mejores, días de Instituto, bailes de graduación, noches en que me escabullía furtivamente en su habitación para velar sus sueños… para oírla susurrar mi nombre, épocas mejores en los que había plumas y luz de luna, en los que Bella se sonrojaba y en los que sus ojos brillaban como dos profundos pozos de agua cristalina en los que anhelaba sumergirme. A esa época deseaba volver, donde nada podía lastimarla, donde yo podía defenderla.

Esme bajó las escaleras presurosa, en sus manos traía una manta y una almohada… supe en seguida cual era su intención. Se puso de cuclillas frente a Jacob, que seguía durmiendo ajeno de lo que pasaba a su alrededor y con una de sus manos alzó su cuello para poner la almohada debajo de su cabeza… Jacob quedó bien acomodado. Inocentemente mi madre tomó la manta para cubrirlo, pero yo interrumpí su trabajo,

_Esme, no creo que él necesite la manta… su cuerpo por sí solo genera calor_ murmuré. Ella se disculpó por sus adentros y retiró la manta,

_No puedo evitar pensar que a pesar de todo, solo es un niño_ dijo antes de volver a subir las escaleras, sus buenas intenciones parecían ser absurdas en un vampiro, sin embargo nadie mejor que ella veía mejor la fragilidad humana. Sentía a Bella removerse en el sofá, parecía acalorada y sin embargo temblaba levemente. Toqué su frente suavemente y caí en la cuenta que padecía fiebre… puse mis manos en ambos lados de sus mejillas arreboladas y esperé a que bajara su estado febril, Rosalie hacía lo mismo en su frente… Rápidamente su calor descendió y su estado parecía oscilar entre lo frío y lo cálido, su cuerpo cambiaba a medida que pasaba el tiempo.

“Solo busco a Jake… ¿hola?”

Capté la voz mental de Seth a las afueras del jardín trasero, parecía debatirse entre seguir llamándolo mentalmente o golpear la puerta.

_Ven Seth, Jacob duerme_ dije sabiendo que él me iba a escuchar. Él se acercó a la puerta sigilosamente y Carlisle la abrió con un gesto de bienvenida… enseguida el pequeño Seth se calmó y decidió acercarse.

_No quiero importunar… mi hermana me espera afuera, solo vine a hablar con Jacob_ dijo con una sonrisa de disculpas, le sonreí de vuelta dándole ánimos a entrar,

_Seth, pasa… eres bienvenido a esta casa al igual que tu hermana_ dijo mi madre bajando las escaleras _ ¿deseas comer algo?... sé que no han estado alimentándose muy bien últimamente y de todas maneras tenemos comida para humanos de sobra_ los ojos marrones de Seth se abrieron de par en par con un brillo singular, mi madre había dado en el clavo.

_Gracias Señora… en verdad no quiero molestar, es muy amable de su parte._ dijo sonriente. Seth entró a la casa y le señalé el sofá que estaba a un lado del de Bella,

_Edward… deberías hacer una de tus especialidades_ murmuró mi madre desde la cocina. Miré a Seth que parecía no entender

_ ¿Te apetece bacón con queso y canela?_ pregunté a un Seth que me miraba con admiración,

_Si… lo que sea, las tripas no paran de rugir_ dijo sobándose el estomago, en ese momento comprendí a mi madre, ellos estaban allí afuera protegiendo a mi esposa, haciendo mi trabajo mientras que no recibían ninguna retribución a cambio. Dejé a Bella al cuidado del niño lobo y me dirigí a la cocina a desplegar mis habilidades culinarias, interés heredado de Esme por la cocina Italiana y la habilidad de Bella en la cocina. Cociné rápidamente el bacón con queso y canela y llevé el plato a Seth para que se alimentara… él lo tomó mirándolo pensativamente…

“Tal vez Leah tenga hambre”…

_Llévale éste a ella primero, hay más en la cocina_ le dije reconfortándolo, su hermana estaría hambrienta al igual que él aunque dudaba mucho que quisiera recibir algo de nosotros. Seth se levantó del sofá y fue hacia la puerta con el plato de comida salió llamando a su hermana. Me dirigí a la cocina a buscar más para Seth, por si su hermana decidía aceptar el plato de comida, al retornar a la sala Seth aparecía por la puerta con un gesto de disculpa y el plato todavía en su mano,

“Lo siento… no quiere” pensó, asentí con la cabeza dejando a un lado lo que yo le traía. Me senté junto a mi esposa mientras que Emmett y Seth se acomodaban para ver un juego de futbol americano en la televisión, Rosalie y Alice estaban sentadas a los pies de ambos… Alice parecía haber encontrado un analgésico,

“Curiosamente los lobos me calman el dolor de cabeza… irónico ¿no?” pensó mirando en mi dirección. Verdaderamente irónico sabiendo que eran los únicos a los que su don no podía ver, una extraña conexión con la criatura que Bella guardaba celosamente en su interior… curioso.

Luego de unos minutos después de haberme sentado en el sofá junto a mi esposa, ella se removió incómoda entre las mantas, se despertó temblando y más pálida de lo que ya estaba…

_Edward, tengo frío_ dijo en un susurro, su vos era entrecortada y temblorosa y parecía una frágil hoja al viento. Intenté cobijarla pero resultó ser inútil, ella no paraba de temblar…

“Edward… Seth” pensó Alice, miré por un momento al joven lobo y supe lo que debía hacer,

_Set… Bella está muy mal, ella necesita calor_ le dije resignadamente, aunque prefería mil veces que el calor de Seth y no el de Jacob, que parecía estar en un sueño profundo a juzgar por los fuertes ronquidos. Seth enseguida pareció comprender y se paró para acercarse a nosotros, entonces oí a Rosalie gruñir por lo bajo,

_Rose está bien…_ dijo Bella lanzándole una mirada tranquilizante _Seth… qué bueno que viniste_ concluyó mi esposa sonriendo levemente al pequeño lobo,

_See, vine en busca del gran Alpha, pero lo encuentro dormido…_ murmuró de manera burlona _bien Bella… ¿tienes frío?, acurrúcate junto a mí_

Bella sonrió y pidió ayuda a Rosalie para incorporarse y sentarse en el sofá, hizo un gran esfuerzo, con los ojos cerrados y conteniendo la respiración terminó cómodamente sentada entre los mullidos almohadones. Yo me senté junto a ella y le sostuve la frágil mano mientras que Seth se situaba al otro lado de ella con su plato de comida en las suyas,

_Oh… pobre Jake, sabía que no aguantaría_ los ojos de mi esposa revoloteaban hacia la puerta en donde se hallaba su mejor amigo.

_No quisimos despertarlo… realmente está muy cansado como para quedarse dormido allí_ dijo Carlisle en tono bajo,

Mi Bella seguía temblando y yo me mantenía lo más alejado de su cuerpo, lo más que podía… aún así el frío azotaba su cuerpo provocando leves temblores, Seth pareció darse cuenta de ello y me miró interrogante,

“¿Puedo… abrazarla?... solo con fines terapéuticos” sonreí ante aquello y asentí con la cabeza. Él puso su brazo alrededor de los hombros de mi esposa y la contuvo, mientras que con la otra mano se disponía a comer.

_Gracias Seth, de veras es reconfortante_ murmuró mi Bella.

Largos minutos pasaron en los que miramos sin ver un juego de preguntas y respuestas que daban en la televisión, solo Emmett parecía interesado en tal programa. En el ambiente solo se escuchaba el fuerte ronquido de Jacob, las maldiciones internas de Rosalie, perceptibles solo para mí, y la respiración lenta y profunda de Bella. Seth se repitió el plato de comida, alegando que estaba muy bueno y que no quería que se desperdiciara la comida que había quedado, Esme se lo sirvió gustosamente. Al menos uno de los miembros de la manada no era renuente a aceptar la hospitalidad de la familia.

_Mmmm… en serio hombre ¿Dónde aprendiste a cocinar así?_ murmuró Seth masticando un gran trozo de bacón,

_Esme me obligaba a ver a Martha Stewart_ murmuré por lo bajo, Seth rompió a reír y Bella sonreía cansinamente, apretó mi mano y acaricié con mi dedo pulgar sus frágiles dedos.

Percibí el desagrado de Jacob y su pronto despertar,

_Justo a tiempo_ murmuró quejosamente Rosalie que se encontraba sentada en el suelo con la cabeza apoyada en las rodillas de Bella _la imitación a la motocierra comenzaba a cansarme_

Jacob despertó confundido y a la vez enojado, le parecía burlesco que alguien le hubiera puesto una almohada impregnada de olor a vampiro bajo su cabeza.

_Hey! Jake despertó_ murmuró Seth, Jacob aún desde el suelo lo miró sorprendido preguntándose qué diablos hacía él allí,

_Vino a buscarte_ aclaré _Esme lo convenció para que se quedara a desayunar_ Jacob miró a Seth mientras se levantaba, esperando una explicación de él…

_Si, Jake, solo estaba viendo si estabas bien, ya que no regresaste a fase. Leah estaba preocupada. Le dije que probablemente te quedaste dormido en forma humana. Pero ya sabes como es. Además, tienen toda esta comida…_ dirigió su mirada hacia mí _Hombre… cocinas bien_ a lo que murmuré un “gracias”. Sin embargo Jacob no parecía calmado, solo fijaba su vista en el brazo de su amigo… ¿cómo podía ser tan estúpido?, ¿en qué momento olvidó que yo era el esposo de Bella y que yo era el que debía proclamarla y no él?... idiota.

_Bella tenía frío_ solté mordazmente, ¿qué derecho tenía de ponerse celoso?... maldito iluso. Seth comprendió mis palabras y soltó el hombro de Bella agarrando el plato que tenía sobre su regazo con ambas manos.

_¿Leah esta patrullando?_ preguntó mientras se acercaba al sofá.

_Si, en eso está. No te preocupes, aullará si ocurre algo. Cambiamos puestos a medianoche. Corrí durante doce horas_ pude ver la aflicción y confusión de Jacob en su mente,

_¿Doce horas?... espera un momento ¿qué horas es?_ dijo despabilándose por completo,

_Está a punto de amanecer_ murmuró Seth mirando por la ventana.

_Maldición, lo siento, Seth. De verdad, tenias que haberme despertado_ dijo arrepentido de haber descansado tanto tiempo.

_No Jake, necesitabas un sueño reparador. ¿No habías descansado desde cuándo? ¿La noche antes de tu última patrulla para Sam?, ¿unas 40 horas? ¿50?

No eres una máquina, Jake. Además, no te has perdido nada._ dijo como restándole importancia. Aunque solo se había perdido de la notoria recuperación de Bella gracias a Seth que la había mantenido caliente.

Jacob observó a mi esposa y pudo sacar conclusiones de lo mismo que había notado yo, el calor había retornado a su cuerpo y se veía realmente mucho mejor… el color en sus mejillas, no tan vivas como antes pero rosadas al fin, sus ojos brillantes y su cabellos sedoso, mi Bella parecía recuperarse lentamente. Solo esperaba que fuera una recuperación duradera…

_¿Qué tal la costilla?_ dijo señalando el costado de Bella,

_Soldada y en su sitio… ni lo siento_ determinó como si hubiese sido algo tan fácil. Me contuve de decir algo apretando los dientes, Jacob pareció comprender mi actitud, él también pensaba en que la expresión “todo perfecto” que utilizaba Bella estaba fuera de lugar, demasiado fuera de lugar…

_¿Que hay de desayunar? ¿O negativo o AB positivo?_ dijo sarcásticamente a mi esposa. Ella lo miró un momento y le sacó la lengua, volvía a ser ella, sin embargo luego miró hacia abajo algo avergonzada.

_Tortilla…_ murmuró mirando el vaso de sangre que se situaba entre nosotros.

_Ve a buscar algo para desayunar Jake_ dijo Seth apuntando su comida _hay un montón en la cocina, debes estar hambriento_

Jacob ignoró el estado hambriento en el que se encontraba, aunque le rugía el estómago…

_¿Qué está desayunando Leah?_ preguntó inquisitivamente como buen jefe de la manada que era.

_Yo le llevé comida antes de tomar la mía, pero dijo que prefiere comer algún animal atropellado en la carretera, pero supongo que cederá… estos rollitos de canela…_ dijo distraídamente,

_Entonces iré a cazar con ella_ dijo para dar media vuelta y dirigirse a la puerta.

_Un momento ¿Jacob?_ dijo mi padre interrumpiendo la escapada del lobo, él respetuosamente volteó a ver lo que éste quería… mi padre se acercó prudentemente hacia él dejándole su espacio, respetando la cercanía cuidando que Jacob no se sintiera incomodo.

_-Hablando de cazar –empezó en un tono sombrío – Eso va a ser un problema para mi familia. Comprendo que nuestra pequeña tregua es inapropiada en este momento, así que quiero tu consejo. ¿Sam estará esperando para cazarnos fuera del perímetro que has creado? No queremos tener ningún altercado que dañe a ningún miembro de tu familia, o en el que perdamos alguno de la nuestra. Si estuvieras en nuestra situación, ¿qué harías?_

Jacob se sorprendió de que mi padre le había pedido consejo, no concebía la idea de estar en lugar de un vampiro… pero así y todo habló,

_Es arriesgado_ dijo pensativo _Sam está más calmado ahora, pero tengo por seguro que lo habrá pensado. El tratado ha sido anulado. Si piensa que la tribu o algún humano está en peligro no va a hacer preguntas antes, si sabes a que me refiero. Pero, a pesar de eso, su prioridad es La Push. No son suficientes para defender decentemente a la gente si ponen en marcha partidas de caza muy amplias. Apuesto a que se está quedando cerca de casa._ mi padre asintió comprendiéndolo.

_Aconsejo que salgan todos juntos, por si acaso. Y mejor durante el día, por qué lo más lógico sería que lo hicieran de noche, como tradicionalmente hacen los vampiros. Ustedes son rápidos, ir a las montañas, cazar lo suficientemente lejos como para que no haya posibilidad de que él mande a alguien tan lejos._ Jacob realmente era un buen apostador, su mente viajaba a mil por minuto considerando todas las posibilidades, él merecía ser jefe de su manada, él tenía pasta para liderar.

_ ¿Y dejar a Bella desprotegida?_ murmuró Carlisle, gran error… sorprendente de mi padre.

_ ¿Y qué somos nosotros? ¿Hígado picado?_ murmuró enfadado Jacob. Mi padre rió por un momento, aunque al ver la cara de enfado de Jacob se detuvo a explicar su inquietud… él no quería que Jacob peleara contra sus hermanos, yo tampoco lo deseaba… luego de esto él tenía que volver a sus tierras y reincorporarse a su comunidad, no debía haber lucha.

_No digo que no vaya a ser duro, pero si realmente vienen para matarla… seré capaz de detenerlos._ dijo fríamente

Mi padre sacudió la cabeza,

_No, no me refiero a que no vayas a ser... capaz. Pero no sería lo correcto. No puedo cargar con eso en mi conciencia._ murmuró mi padre con tono cansino, Jacob dejó en claro que estaría en su conciencia y que podía ser capaz de superarlo.

_No, Jacob. Haremos todo lo posible para que nuestras acciones no hagan que eso sea necesario_ Frunció el ceño con entendimiento _Iremos de tres en tres_ decidió un segundo después _ Eso es lo mejor que podemos hacer_

Jacob pensativamente meneó la cabeza de manera negativa,

_No sé doc, esa no es la mejor estrategia_

_Tenemos algunas habilidades extra que lo igualarán_ trató de convencerlo mi padre _ Si Edward es uno de los tres, podrá darnos un radio de seguridad de unos pocos kilómetros._ todos miraron hacia mí. Ni que fuera el más loco de los que estaban ahí… jamás dejaría sola a mi Bella. Prefería morir de inanición, mi alimentación era poco importante si no la tenía a ella. Ellos parecieron ver mi modo de pensar en el rostro…

_Estoy seguro que hay otras maneras_ concluyó mi padre volteando a ver a Jacob. _Alice… ¿supongo que podrás ver qué rutas serían un error?_ dijo a mi hermana que miraba atenta la conversación. Todos ansiaban urgentemente salir de caza, todos estábamos sedientos.

_Las que desaparezcan… muy fácil_ concluyó Alice.

Me relajé ante la posibilidad de descartar el primer plan que a Carlisle se le había ocurrido… jamás me separaría de ella, lo sentía mucho por mi familia, pero ella era mucho más importante que cualquier alimento.

Jacob decidió que lo mejor era irse, dio unas cuantas recomendaciones a Seth y volteó para marcharse. Seth miró a Bella…

_¿Me necesitas?_ murmuró ante la posibilidad de irse a realizar sus responsabilidades con la manda,

_Tiene mantas_ contestó Jacob por ella.

_Estoy bien Seth, gracias_ dijo Bella rápidamente. Su disculpa se debía más a lo que Jacob podía llegar a pensar no a lo que ella realmente necesitaba. Como siempre anteponiendo siempre a los demás que a ella misma.

Entonces Esme salió de la cocina con un plato rebosante en sus manos, tímidamente se ubicó detrás de mi padre y luego dio un paso vacilante hacia Jacob que la miraba con curiosidad.

_Sé que... a ti no te gusta la idea de comer aquí, el olor es demasiado desagradable. Pero me sentiría mucho mejor si te llevas algo de comida contigo cuando te vayas. Sé que no puedes volver a casa, y es por nuestra culpa. Por favor... para calmar mis remordimientos. Toma algo para comer._

Jacob admiró la manera en que Esme le ofrecía su comida, no era que le simpatizaba pero… de alguna manera Esme y su rostro compungido por la pena, la dulzura y la suplica le recordaba a su madre… vaciló solo por unos momentos antes de aceptar el gesto de mi madre,

_Sí, claro. Claro_ murmuró _Supongo que Leah seguirá teniendo hambre o algo_ tomó el plato y lo llevó consigo alejándolo lo máximo que podía de su cuerpo.

“Tendré que estamparlo contra un árbol o algo… maldita sea.” Pensó recordándome… “¡Ni se lo menciones!. Deja que crea que me la comí.” Ni si quiera tuvo la gentileza de darse vuelta y mirarme a los ojos… “Chupasangre me la debes”… No hice nada, no dije nada y no le mencioné nada a mi madre, eso rompería su corazón, el maldito chucho también me debía unas cuantas cosas y podía simplemente comerse la comida sin refunfuñar…

Esme le dio las gracias sonriente y Jacob con el rostro arrebolado por la vergüenza, le devolvió las gentilezas… parecía ser que empezaba a aflojar su manera de pensar con respecto a los vampiros, algunos podían no tener el corazón de piedra como él pensaba… algunos podían tener más humanidad a pesar de su condición. Mi esposa le preguntó suavemente si pensaba volver más tarde, a ella le gustaba pasar el tiempo junto a su amigo y yo no tenía que replicar nada… ella parecía más animada cuando estaba en su presencia. Él le respondió que en realidad no lo sabía, aunque era obvio para todos que eventualmente volvería… no perdería de vista a Bella. Ella apretó los labios tratando de no sonreír,

_Por favor… tal vez tenga frío_ … bonita manera de chantajear, sabiendo que bajo ese aspecto él se apresuraría a volver. Al darse cuanta de lo doloroso que sería más adelante esta situación se arrepintió casi al instante en que dijo “Tal vez”… no podía culparlo, todos sabíamos que se venía lo peor.

_Jacob_ lo detuvo mi madre _He dejado un cesto de ropa en el porche. Son para Leah. Están lavados, he intentado tocarlas lo menos posible._ Frunció el ceño. _ ¿Te importa llevárselas?_ mi madre ignoraba los pensamientos de Jacob y por ese motivo continuaba ofreciéndoles cosas, él no quería herir su sensibilidad… Esme le parecía demasiado gentil como para decirle “No” a algo. Aceptó lo que le ofrecía y se marchó hacia el bosque…

Demasiado pronto Bella volvió a dormirse, en paz y tranquila con cómo se estaban dando las cosas, parecía optimista… algo que yo no podía compartir. Esa cosa estaba todavía demasiado tranquila dentro de ella, gozando del bienestar en su vientre mientras ella hacía su mejor esfuerzo por sobrevivir. Algo estaba gestándose, la suma tranquilidad en la que estábamos inmersos era el paso previo a la tempestad… la antesala al desastre.